El Matrimonio Perfecto

Capitulo 61 - Matrimonio de papel...

Narra Dulce

Por más de que estaba feliz de compartir tiempo con mi madre ya me estaba cansando de que me preguntara cada dos segundos cuando pensaba regresar a mi casa, no era una decisión fácil de tomar después de todo no se acostó con esa zorra pero como muy bien lo dice ella no se negó a sus encantos ni tampoco la rechazó, de pura suerte se quedó dormido antes de que sucediera nada pero sigue siendo culpable de muchas otra cosas.
Los niños están muy feliz con su abuela y me sorprende ver qué Blanca después de todo si tiene instinto maternal y lo demuestra consintiendo a sus nietos, Alonso bota la baba cuando la ve y definitivamente se ha convertido en su consentido.... como siempre ese niño robándose el show. Extrañamente han dejado de preguntar por su padre y están muy contentos, cuando Pablo se los lleva a pasear siempre regresan más contentos cosa que no me parece mal pero aveces me parece raro.
Me tomo un té de jengibre que me ha preparado mi mamá ya que no puedo oler mi preciado café ni a kilómetros porque unas espantosas náuseas aparecen, llevo evitando algunas semanas esto de ir al médico pero ella insiste en llevarme, sé que probablemente no sea nada del otro mundo pero no me gustan mucho los médicos, en los últimos tiempos visite muchos y créanme que no pienso visitarlos más.
— Tienes todo listo hija?— mi madre entra hasta la cocina sacándome de mis pensamientos
— Para qué mamá? — pregunto mientras me llevo el último poco de te a la boca.
— Para la cita con el médico... te dije que era hoy? — me dice mientras rueda sus ojos.
— Hoy? — pregunto no muy convencida de querer salir.
— Si hoy.... tenemos que salir ya si queremos llegar a tiempo — mira la hora y luego a mí.
— Y los niños?
— Los dejamos con Pablo — a esta hora? debe estar trabajando y llevarle a mis hijos es un abuso.
— A esta hora está en su oficina, sé que el hombre tiene una fortuna pero sus gastos extravagantes dependen de la empresa .
— No se negará a cuidarlos sabes que los adora— lo pienso por un momento y termino aceptando, lleva tantos días pidiéndome que vaya al médico que se no quitará el dedo del renglón.
— Tu como que te estás llevando mejor con él no? Antes pasaban peleando — se acerca a mi tomándome de las manos para luego mirarme con nostalgia y acariciar mi mejilla.
— Él siempre quiso protegerte... desde niños, una vez siendo pequeño me dijo que siempre te iba a proteger de todo y de todos.... créeme que me alegra que haya cumplido con su palabra — es tan extraño sentirla tan cercana pero este momento no lo cambiaría por nada.
— Siempre ha sido como mi ángel protector — suspiro y la veo asentir.
— Te quiere.... y mucho.
— Y yo a él .... bueno pero no nos pongamos sentimentales — sonrío y me abrazo a ella.
— Vamos arréglate y agarra tus cosas con las de los niños.
— Ya ya .... no me demoro — subo las escaleras rápidamente y cuando llego arriba tengo que agarrarme de la pared, la respiración se me corta y otro mareo vuelve a aparecer, Charlie va saliendo de su habitación y se acerca corriendo hacia mi.
— Mami estás bien? — me mira preocupada y yo solo logró esbozar una media sonrisa para no asustarla.
— Si mi amor sólo fue un mareo.... puedes agarrar tus cosas y las de Alonso para llevárselas a la abuela ? Mami se tiene que cambiar— camino hasta la habitación y busco algo para ponerme.
— Vamos de paseo?— pregunta emocionada.
— Mami va a hacer unas cosas con la abuela y ustedes se quedarán con tu papi — la veo fruncir la frente para luego llevarse sus manos hasta la cintura.
— Pues con cuál de los dos ? — me coloco a su altura y acaricio su carita.
— Con Pablo mi amor
— Aaa es que yo creía que....
— Creías qué mi amor ?
— Nada mami voy por mis cosas — sale corriendo de la habitación dejándome con la palabra en la boca.

El camino de ida a Mexico se me hizo corto, bueno en realidad dormí todo ese tiempo mientras el chofer de mi madre manejaba, apenas dejamos a los terremotitos con mi querido y paciente primo mi mamá y yo llegamos a la clínica, no tuvimos que esperar porque pasados cinco minutos me llamaron, una doctora muy amable me hizo cientos de preguntas, me hizo un chequeo general y me mandó un examen de sangre express cuyos resultados estarían listos en máximo una hora, detestaba que me sacaran sangre y eso no era todo también detestaba esperar no soy una mujer para nada paciente lo poco que tengo de paciencia la gasto con dos terremotitos andantes cuyos nombres son Charlotte y Alonso.... el resto de gente realmente tiene que correr cuando pierda mi paciencia y mas últimamente que tolero menos las mentiras, la incompetencia de la gente y tener que esperar, que a acaso no sirve todavía llevar el apellido Uckermann?
— Deja de agarrarte el cabello se te va a caer — bajo mis manos colocándola sobre mis piernas pero detesto esperar y me impaciento.
— Odio esperar mamá — le digo al tiempo en que agarro una revista así sea para pasar sus hojas.
— Ya lo se, yo también lo odio pero ten un poco de paciencia niña se trata de tu salud — me contesta en voz baja ya que esto está lleno de gente.
— Pues ya se pero que acaso no saben quién soy yo? Ósea todavía llevo estos hermosos anillos en mis dedos que indican que estoy casada con uno de los hombres más ricos del país .... y yo aquí esperando por unos malditos exámenes — es que no puedo creerlo realmente no puedo creerlo, yo teniendo que esperar.... el mayor despropósito de la vida.
— Te juro que soy capaz de pagar más de lo que cuesta ese examen exprés con tal de que te calles, hablas más que tu padre y eso es mucho decir.... ese hombre tiene el don de la palabra
— Yo.... — cuando voy a contestar soy interrumpida por una enfermera.
— Dulce Uckermann ya puede pasar la doctora la espera para la lectura de los resultados — nos levantamos y caminamos hasta el consultorio que está no muy lejos de donde estábamos esperando.
— Al fin Dios mío qué lentitud, qué incompetencia, cuando salga de aquí hablaré con el director de esta clínica — mi madre me agarra del brazo y susurra en mi oído
— Entra ya y deja de hablar.... bájale dos rayitas a tu histeria Dulce Maria — usa su tono amenazador así que termino por no llevarle la contraria.
— Ya ya me callo — entramos a la consulta y nos sentamos frente al escritorio de la doctora, ella tienen mis resultados en sus manos, los lee por unos segundos que parecen largos minutos y luego me mira.
— Bueno Dulce ya tengo los resultados de tus exámenes y es justo lo que sospechaba — su rostro no lo puedo leer ya que su expresión no refleja nada.
— Qué? Dígame doctora..... estoy enferma ?— agarro a mi mamá de su mano porque ahora si estoy muerta de miedo.
— No estás enferma..... estás embarazada — escuchar eso me descoloca totalmente.... eso no puede ser posible .
— Qué? Eso no puede ser posible.... esos resultados deben de estar errados.... doctora yo llevo más de un año intentando quedar embarazada y además tenía la prolactina alta.... no puedo estar embarazada — le digo totalmente alterada, mi mente no para de dar vueltas mientras se repite una y otra vez el estás embarazada .
— Bueno sabiendo esto que me dices pues lo único que te puedo ofrecer es que te hagan un ultrasonido y así se sale de dudas — la doctora me mira en espera de una respuesta yo asiento.
— Está bien pero que sea ahora..... no puedo esperar hasta mañana a que me hagan uno me volvería loca .
— Si tranquila yo misma te acompañaré al ultrasonido — todo el camino hasta el lugar donde hacían las imágenes diagnósticas yo iba muerta del miedo, no podía ser que durante todo el tiempo en que Christopher y yo intentamos tener otro hijo no quedara embarazada y ahora que no estemos juntos los esté.... es como si el destino se riera en mi cara, que haría ahora? Tendría que perdonar al idiota? Volver a casa ? Lo único de lo que estaba segura era que lo haría sufrir por todo lo que me había hecho pasar.
Me recuesto en la camilla con mi madre a mi lado agarrando mi mano, apenas colocan el gel y el ecógrafo sobre mi vientre siento como mis ojos se llenan de lagrimas, su corazón se escucha fuerte y claro haciéndome saber que ya está aquí para cambiar todos nuestros planes, miro emocionada la pantalla donde ya se puede observar a este nuevo bebé, no sé qué pensar ni qué decir porque todo esto me ha tomado por sorpresa.
— Bueno ahí estás confirmando lo que salió en los resultados, si estás embarazada Dulce — si antes estaba en shock ahora lo estoy el doble, no sé qué decir y es que parece que la mente me hubiera quedado en blanco.
— Puedo saber cuánto tiempo tiene ? Todo está bien con mi bebé? — miro emocionada la pantalla sin poder creer todavía lo que está pasando.
— Creo que tiene al rededor de 10 semanas y su corazón late fuerte y claro pero lo mejor es que vayas con tu ginecólogo o ginecóloga para que te haga un chequeo más exhaustivo.
— Pero todo está bien ? — pregunto ya preocupada porque no he tenido ningún tipo de cuidados.
— Si todo está bien— escuchar eso me relaja un poco y puedo respirar más tranquila.

Camino completamente abstraída de lo que sucede a mi alrededor, llevo un bebé mío y de Christopher dentro de mí y ni siquiera sabía que existía, siento algo raro esta vez quizás es el hecho de que Chris no está a mi lado para compartir esta noticia con la que soñamos por tantos meses. Mi madre me invita a tomarnos algo cosa que acepto porque todavía no termino de digerir esta noticia, es realmente una locura y por un lado estoy feliz porque amo a mis hijos con toda mi alma pero por el otro me aterra no poder perdonar completamente a Christopher, que esta sombra nos persiga toda la vida y que este bebé sufra por eso.
— Y ahora que vas a hacer hija?— mi madre me saca de mis pensamientos haciéndome esa pregunta que ni yo misma tengo respuesta.
— No se — respondo concentrada en mi taza de té.
— Cómo que no sabes.... no piensas volver a tu casa ?— ruedo los ojos ante su insistencia en que regrese a la casa, como si fuera tan fácil decidir qué hacer.
— No es tan fácil esta decisión mamá — le respondo cortante.
— Lo se Dulce pero ya sabes que no se acostó con esa mujer, que ella no está embarazada y que ahora tú eres la que lleva un hijo suyo en tu vientre— coloca su mano sobre mi vientre causándome una reacción tan extraña, nunca había estado en esta etapa y ahora es algo muy diferente con ella a mi lado.
— Ya se pero.... quiero tomarme más días para asimilar esta noticia yo sola.... es más el idiotita ni siquiera se merece saberlo todavía — mi madre se ríe mientras niega con su cabeza y se vuelve a acomodar en su silla.
— Pero regresarás a tu casa? , Dulce es tu lugar y el de tus hijos además ellos deben extrañar a su padre no seas egoísta con ellos— dejo mi taza sobre la mesa y la miro sin poder creerlo, se había demorado en juzgarme.
— No soy egoísta también tengo que pensar en mi, hace rato no lo hacia y cuando lo hago resulta que soy egoísta— le digo exaltada.
— Está bien perdón por lo que dije pero tienes que darte cuenta que ahora no sólo dos niños dependen de ti si no tres y además ya sabes que Christopher no te engañó.
— Nada más porque se durmió el idiota por más nada pero seguro que si se besó con esa zorra.
— Y entre más tiempo te tardes más tiempo a solas lo dejarás con la zorra— trato de no escucharla porque de verdad ya no quiero escucharla.
— No me molestes mamá — le digo irritada.
— Ya doña malgeniada no te digo más nada... no vaya a ser y aproveche que está solo y si logre que le haga un hijo— casi me ahogo con su comentario y hace que se me vaya el color de la cara.
— Cállate mamá no digas eso ni en broma — eso sí que no, sería el colmo que el idiotita siguiera siendo un idiota y se metiera con esa vieja siendo consciente.
— Si no te lo digo yo quien te lo va a decir?

Dos semanas después

Me siento sobre la cama viendo como mis empleadas organizan las cosas en la habitación, no sabía cuánto extrañaba esto hasta que regresé, la cama y mis almohadas se sienten como el paraíso y los niños por fin se han quedado dormidos después de organizar todo en sus habitaciones.
Dejo que se ocupen de la tarea que les puse mientras bajo a la sala por las ultimas cosas que quedaron ahí, tengo a todo el mundo corriendo por la casa ya que Christopher se nota que no sabe dirigir una casa, es en el momento en el que hablo con la cocinera cuando siento como se abre la puerta.
— Eso es todo Marta mañana te hago la lista de las comidas de la semana ya puedes retirarte— la mujer se retira y me volteo para verlo después de tanto tiempo.
— Dul.... que haces aquí?— siento tantas cosas en este momento que me encantaría gritarlas pero trato de mantener la calma, mi indiferencia será su mayor castigo.
— Es mi casa no? Sigo siendo Dulce Uckermann aunque a varias personas les fastidie — intento caminar hacia las escaleras pero el me detiene agarrándome del brazo.
— Mi amor eso quiere decir que....— sonrío de la manera más hipócrita que puedo mientras acaricio su mejilla.
— Eso quiere decir que volveré a la casa, viviremos bajo el mismo techo y volveremos a ser el matrimonio perfecto.... pero no esperes más de mi Christopher, seremos un matrimonio de papel y de apariencias.... justo como cuando nos casamos.

Para las que tanto me insistían 😂aquí está el capítulo.... tarde pero aquí está.... ni les digo cuánto demore escribiéndolo 🤦🏻‍♀️ ando sin inspiración últimamente 🙊 que les parece otro bebito de los Vondy?👶🏻 Dul volverá a ser la misma de antes para castigarlo?🤔 Dejen sus comentarios y votos⭐️ las quiero 💕