Viviendo con El

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🌸 Karol narra

Las manos me empezaron a temblar y se me hacia muy difícil contestar. Hasta que al fin pude.

Karol: ¿aló?

Mike: ¿Karol?

Karol: si, si, soy yo, Mike ¿dónde estás? ¿estás bien?

Mike: hey, tranquila. Si estoy bien. De hecho estoy en el tren rumbo a la residencia.

Karol: ¿vuelves? Que bueno, Ronda, nos tienes muy preocupados. ¿sabes? Voy para allá y esperaré a que llegues.

Mike: no es necesario, Karol, porque...

Karol: no digas nada más - corté la llamada.

Estaba nerviosa y confundida, al parecer no estaba tan molesto conmigo por teléfono. Ojalá todo vuelva a como era antes.

Avancé hasta la puerta atravesando a todos, que estaban juntos conociendo al nuevo integrante.

Sam: ¿a dónde vas?

Karol: luego te digo.

Salí del pasillo y tomé un taxi. Me dirigí hasta la estación de trenes donde debería llegar Mike. Cuando llegué en una pantallita se veía el horario de los trenes, no sabía ni siquiera de donde venía, pero el más pronto en llegar llegaría en cinco minutos. Asì que me senté a esperar.

El tren se estacionó frente a mí. Eran muchos vagones y no tenía ni idea en cual venía Mike. Me levanté del asiento y empezé a mirar a los lados. Nada, nadie conocido. Hasta que unos dos vagones más allá, lo reconocí. Él también miraba hacia los lados, buscando algo.

Hasta que me miró, primero no sabía muy bien que hacer, así que le sonreí. Y como si fuera un impulso empezé a correr hacia él, mientras que él me esperaba con los brazos abiertos. Dejó su mochila en el suelo para darme un abrazo. Me lancé sobre él y le di un fuerte abrazo.

Karol: creí que no te volvería a ver - susurré a su oido.

Mike: aquí estoy, bonita.

Me separó de él y me cogió el rostro para darme un dulce beso en los labios. Espera... ¿Por qué lo hacia? No lo sé, pero me encantaba. Los dos disfrutabamos de cada segundo. Ese beso se convirtió en el más emotivo que jamás di en mi vida. Lo quería demasiado y haría lo que sea por él ¿él estará dispuesto a hacer todo por mi?

Nos separamos y me miró aún agarrandome la cara. Sonrió y se agachó para recoger su mochila.

Mike: lo siento, no sé porque lo hice - riendo y algo avergonzado