Tiré mi carpeta.
Por culpa de que alguien me hiciera tropezar, haciendo que me cayera al suelo, desparramando todos mis deberes y notas en el suelo del pasillo.
Juro que no soy patosa. Nunca he roto un plato en mi vida. Fue porque realmente un pie que estaba en mi camino mientras intentaba encontrar unos deberes en mi carpeta me hizo tropezar. Intenté ignorar las risas y comentarios sobre mí mientras gateaba por el suelo intentando recoger mis cosas. La gente que pasaba por al lado las pateaba enviándolas más lejos de mí y las pisaban, dejando las huellas de sus zapatos marcadas. Apenas había pasado una semana aquí en Dartwell High, hogar de los dragones, y ya me hacían bullying. Mientras me estiraba hacia mi proyecto de inglés en el que trabajé duro y saqué una A+, un zapato se puso encima.
—Pero buenos días, Nerdy Naomi —dijo con una sonrisa de superioridad.
Apreté los dientes, arrugando los papeles en mis puños apretados.
—Hola, Raymond.
Me agarró de la camiseta, forzándome a que me levantara. Después me sujetó contra los casilleros, haciendo que tirara mi carpeta y todo lo demás otra vez.
Sonreí.
—¿Qué pasa Raymond, sigues odiando el nombre que tu mami te dio? —Intenté llamar su atención.
Me fulminó con la mirada y me levantó del suelo. Eso solo me dejó mirar sus fríos ojos marrones.
—No sabía que así es cómo conquistas a una chica. ***
Se acercó a mí, a centímetros de mi cara. Mis ojos marrones miraron a través de mis gafas y acabaron en él.
—Sí, claro, si puedo considerarte una chica.
De repente, en la última palabra, Raymond me soltó y me hizo chocar contra el suelo, aterrizando sobre mi trasero. Hice una mueca por el dolor, aterricé justo sobre mi coxis. Hice lo que pude para levantarme, pero me volvió a empujar hacia el suelo con su pie.
—Vaya Raymond, claro que sabes conquistar a una chica.
No contestó.
No pude evitar levantar una ceja.
—¿Qué pasa? ¿Últimamente no puedes inventarte ninguna respuesta, Raymond?
—Cállate Naomi. Solo cuídate de quedarte donde estás —me gruñó en un tono bajo antes de añadir—. Abajo del todo —Con eso, se marchó para volver a juntarse con sus amigos, riendo todos juntos.
Me senté en el suelo. La gente que pasaba susurraba y se reían de mí y mi estado. Alejaron, pisaron e incluso cogieron mis papeles solo para rasgarlos en tiras. Sabía que lo que estaban haciendo con mis papeles era lo que deseaban hacer conmigo.
Rápidamente volví a concentrarme en recogerlo todo otra vez. Esta vez puse mi carpeta en mi mochila y caminé por el pasillo. Me arrojaron contra los casilleros, me empujaron, y casi me tropecé con otros pies que mágicamente aparecieron en mi camino hasta el final del pasillo. Cuando llegué a mi casillero quité el letrero de Pateame de mi espalda y lo tiré dentro del casillero. Escuché "boo's" y "aw's" del grupo de chicos que debían haber puesto el papel en mi espalda.
Este es un día corriente de Naomi Lorraine también conocida como Nerdy Naomi. La chica de 17 años con A's impecables, un armario pobre y siempre en el instituto. La víctima perfecta para hacer bullying cuando te sientes triste o tan enfadado que quieres golpear a alguien, todos vienen a mí. ¿Y qué hago yo? Dejo que vengan. No intento decírselo a nadie. Mis padres o profesores no solucionarán nada. A lo mejor lo harán peor. Y no tengo amigos. Osea, venga. ¿Quién querría ser mi amigo solo para bajar su estatus social?
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TRADUCCIÓN: The Good Girl's Bad Boys: The Good, The Bad and The Bullied.
Humor-Es bastante simple en realidad -me dijo Bennett. -Tú serás nuestra chica buena -dijo Declan. Jordan sonrió. -Y nosotros seremos tus chicos malos. Estuve en silencio por un momento. Los miré, a contrato y otra vez a ellos. Después, calmadamente pus...