Selena se encontraba a un paso de marcharse de casa luego de una larga noche de diversión, una de las mejores pijamadas que ellas han tenido, ni siquiera durmieron un minuto, las palabras, juegos y películas las mantuvieron entretenidas toda la noche. Se suponía que tendrían que ir a trabajar, pero ambas se vieron obligadas a poner una excusa, ya que, por obviedad no podrían llegar a trabajar sin haber pegado un ojo.
Antes de salir de casa dejo un beso en su mejilla que la dejo estática, es obvio que es de lo más común despedirse de aquella manera, pero cada que lo hacía le provocaba un temblor de pies a cabeza. Demetria se voltio mientras cerraba los ojos, se recostó sobre la puerta eliminando un suspiro de cansancio, de resignación ante todo lo que estaba sintiendo por ella. Paso sus manos por el rostro mientras dejaba caer un lagrima por su mejilla.
- ¿Qué paso Demi? - pregunto su hermana que venía bajando las escaleras, ella soltó un sollozo y su hermana corrió para abrazarla.
-el problema es que no lo sé, no lo entiendo. No sé que sucede conmigo, no sé que hacer, no quiero sentirme así, yo necesito que termine.
- ¿Qué termine que? - pregunto con fundida y con un nudo en la garganta ver a su hermana así le rompía el corazón
-no sé que hacer cuando la tengo cerca, yo no lo sé, la conozco hace tanto tiempo y no quiero perderla por estos estúpidos sentimientos que ni siquiera entiendo.
- ¿te gusta Selena? ¿hablas sobre ella verdad?
-si, pero no lo sé. Yo, cuando está cerca soy tan feliz, me siento tan bien, tan relajada, cuando pienso en ella mi corazón late de una manera casi desesperada como si lo único que quisiera fuera salir disparado para alcanzar el de ella, mis labios tiemblan cada que miro los de ella.
- ¿Por qué no se lo dices?
-no quiero perderla, no quiero hacer el ridículo diciéndole algo que seguramente ella no comparte, yo solo la olvidare.
- ¿y como lo harás teniéndola cerca todos los días?
-eso cambiara, no la quiero ver más, necesito perderla de vista.
-es lo más cobarde que he escuchado. Pensé que eras otra historia
-lo siento. Lamento decepcionarte.
Al otro día
Llegaba al trabajo temprano como siempre, jamás había llegado una sola vez atrasada. Estaba por instalarme en la caja cuando llega Selena para saludarme ciertamente no iba a dejar de hacerlo de un día para el otro, pero trate de que sonara lo más tajante posible, era tan complicado contestarle así cuando lo único que mostraba su rostro era una dulzura excepcional, una sonrisa que no hacia más que dejarme sin aire, me conocía tan bien que temía que notara mi cambio. Ella me miro extrañada y se fue a su lugar de trabajo. Pasaron las horas y no nos dirigimos la palabra, llegaba la hora del almuerzo. Siempre tomábamos esa hora juntas, pero yo no quería estar a su lado.
-Demz, vamos- dijo sonriéndome del otro lado y me dolía tanto negarme a ella.
-Hoy no puedo ser, lo siento, saldré con Nick- fue cuando se acercó a mí, jamás quise aceptar una salida con él porque el parecía muy interesado y yo no quería nada, así que ella se extraño demasiado.
-pensé que no te interesaba para nada- susurro en mi oído ya que Nick se encontraba a unos metros de nosotras.
-ya, decidí darle una oportunidad.
-okey que te vaya bien- era obvio que ella no sentía absolutamente nada por mí, aunque no me sorprendía.
Estábamos comiendo en el casino como todos los días, pero esta vez me encontraba oyendo una aburrida charla sobre una aburrida película sobre aburrido pirata cuando podría estar disfrutando este momento con Selena hablando de los muchos viajes que nos gustaría conocer y de los muchos misterios científicos que algún día descubriríamos juntos, todo sería así si no tuviera estos malditos sentimientos dentro de mí. Ella estaba sola en su mesa mirando su almuerzo como si de pronto fuera el mejor descubrimiento, vi en su mirada soledad y extrañeza, me dolía verla así quería correr abrazarla, pero lo cobardía siempre ha sido más fuerte que yo, de pronto unos compañeros de acercaron y agradecí que ya no estuviera sola. Ella sonreía, pero no de la manera que lo hace conmigo, se sentía incómodo y yo me sentí tan malditamente culpable.
El almuerzo termino y volvimos a nuestros puestos de trabajo, agradecía que nuestros puestos estuvieran distantes y que hubiera harta gente para que ella no viniera hablarme como lo hacía siempre.
Mas tarde....
Estaba terminando de arreglar mis cosas para marcharme y Selena se acercó a mí,
- ¿vamos juntas? - volver a negarme no era de mi agrado.
-no hoy no puedo, yo tengo que...- intente buscar alguna excusa, pero seguramente ella había notado que yo mentía- tengo que hacer algo.
-okey- dijo triste y aproveche para marcharme, cuando llegue al estacionamiento note que no tenía nada que hacer ahí, ya que era Selena quien siempre me llevaba en su auto y acababa de negarme hacerlo hoy. Estaba devolviéndome cuando me la encontré de nuevo.
- ¿pasa algo? ¿hice algo mal? - pregunto mientras sus ojos se humedecían y a mí se me partía el alma.
-no nada. ¿Por qué piensas eso?
- no me has dirigido la palabra en todo el día, no quisiste almorzar conmigo y ahora me mientes para no irte conmigo.
-no te mentí.
-te conozco demi, no lo olvides, se cuándo lo haces.
-lo siento sel, tengo que irme- intente marcharme, pero entonces me detuvo, su mano sobre mi brazo me hizo vibrar la cercanía de nuestros cuerpos me tenía alucinada. - ¡ALEJATE! - grite dejándola totalmente confundida esos segundos fueron los que aproveche para correr escapando de ella y de mí. Deje de correr cuando note que ella ya no me seguía, relaje mi respiración que se había acelerado desde el momento en que poso sus manos en mi cuerpo. Una vez relajada camine hacia la parada de taxis más cercana y espere uno que me llevara a casa.
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en solo 3
Randombueno como les mencioné, seran mini historias de 3 capítulos si quieren co algún shipp o que se trate de algo en particular tan solo en los comentarios