{26} Revelar

2.6K 215 31
                                    

[  Lunes 15 de Junio, 2015  ]



¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.






Cruzo la entrada de la empresa de Bienes de la familia Holland, siendo esta vez mi visita muy diferente a las anteriores. En la recepción pregunto por el departamento de "Prensa y Difusión", siendo bastante fácil el seguir las instrucciones de la recepcionista. Sin embargo, me encuentro con quien no esperaba.

La mirada se Patrick es amable. Un verde cristalino que me observa con el mismo cariño que siempre había sentido de su parte. Ambos nos acercamos al otro, pasos lentos hasta detenernos frente a frente.

—Hola.

—Hola. ¿Cómo estás?— pregunto inmediatamente, sintiendo un profundo pesar en medio de mi pecho al recordar la última vez que habíamos hablado y como todo había terminado.

—Todo bien. Tú, ¿Cómo has estado todo?— su amabilidad no tiene limites y sé que se interesa realmente por saber de mi.

—Bien, también.— digo queriendo de pronto decir mucho más. —He vuelto a mi horario completo en la universidad hoy.— indico tontamente en relación a mi trabajo.

—Eso es fabuloso.— dice y él parece también querer decirme un millón de cosas más. —Es agradable verte nuevamente luego de tantos días.— la emoción que sus palabras causan hacen que una sincera sonrisa se dibuje en mis labios.

—Para mí también es agradable verte.— respondo y de un segundo a otro, eso se siente que es suficiente para nuestro momento.

Él sonríe también con la bella y atractiva sonrisa que siempre le ha caracterizado.

—Supongo que has venido por Elise.— comenta y yo asiento. —Tendrás que esperar en línea. Está bastante ocupada hablado con alguien.— me indica, mostrándome enseguida donde ella se encuentra.

Cuando siento reconocer al hombre que se encuentra con ella, un quejido de real horror se oculta en mi boca. Me disculpo con Patrick, emprendiendo mi caminar hacía donde ellos se encuentran. Al estar más cerca, puedo escuchar la jovial risilla de mi hermana y las palabras cordiales de Hans.

—Hermana...— susurro para que se den cuenta de mi presencia e inmediatamente, Hans se voltea con una expresión de sorpresiva satisfacción.

—¡Cath! Pensé que vendrías más tarde.— susurra Elise, acercándose y saludándome con un beso en la mejilla.

—Tu llamada ha sido bastante urgente.— le comento y no demoro en seguir. —Me causa curiosidad sabes qué haces tú aquí.— hablo observando directamente a Hans en quien la complacencia que siente no parece ser quitada por nada.

{ II } SUEÑOS SALVAJESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora