One Shots Jerrie

Not A Mistake

"¿Puedes llevarme a casa?" La voz familiar de Jade dijo.

Parpadeé varias veces, mi visión se ajustó a la tenue iluminación de mi lámpara. Nunca duermo con la luz apagada.

Ajusté el teléfono en mi oreja.

Increíble. Es la primera vez que me lo pide. A la 1:30 de la mañana, para arrancar.

Esta es probablemente la cuarta vez que ella me llama en el medio de la noche para llevarla a casa de Dios sabe dónde. Lo odiaba. Pero cuando eres la mejor amiga de Jade, ¿Haces lo que tienes que hacer bien?

"Pez, ¿Me llevas a casa?" Preguntó Jade cuando no le respondí.

Suspiré, ya no tengo sueño. Miré fijamente mi ventilador de techo, enfadada e irritada. Ella me escuchó y suplicó en voz baja: "Por favor, Pez"

"Ya voy" Dije en voz baja. Me senté en mi cama, agarrando la sudadera con capucha del piso y tirando de ella.

"¿Dónde estás?"

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Encontré a Jade esperando fuera de una fiesta todavía en curso. Llevaba su suéter favorito, con la capucha sobre la cabeza. Cuando vio venir mi coche, su expresión no cambió. Permanecía pasiva, como siempre. Abrió la puerta del pasajero y entró.

"Gracias, Perrie" Dijo.

Suspiré de nuevo cuando cerró la puerta. Ella reclinó el respaldo del asiento y se relajó. Puse los ojos en blanco y encendí el coche. Coloqué mi cabello rubio detrás de mi oreja y miré detrás de mí para ver cualquier coche que venía en mi camino. Cuando no estaba, comencé a alejarme.

Me tomó 45 minutos para encontrar esta fiesta. Así que si tengo suerte, podría llevarla a su casa en 20 minutos.

"¿No beberás esta noche?" Pregunté, dándome cuenta de que estaba completamente sobria.

"¿Por qué? ¿Siempre bebo?"

Levanté la ceja hacia ella. "Sí, habitualmente lo haces" Nunca olvidé esa noche trágica cuando ella vomitó por todo mi parabrisas cuando intenté llevarla a mi auto.

Empezó a reírse de repente.

"¿Estás bien entonces?" Yo pregunté.

Riendo todavía, sacudió la cabeza. Sus ojos comenzaron a parpadear, reflejando las luces de las luces de la calle.

"No" Respondió, sonriendo con orgullo.

La miré con seguridad, sus ojos no estaban cansados ​​y enrojecidos. Esta noche es probablemente un milagro.

"Es un milagro, lo sé" dijo Jade repentinamente, expresando mis pensamientos, leyendo mi mente. Esa era una característica de ella que yo amaba y odiaba al mismo tiempo.

"¿Buenas noches?" Yo pregunté.

"Supongo que podrías decir eso"

Y fue el final de esa conversación. A Jade nunca le gustó entrar en detalles sobre temas sin sentido, y tampoco lo hice. Una de las razones por las que acabamos de hacer clic juntas.

Una de las razones por las que me enamore de ella.

10 minutos conduciendo, he oído que ella ronca suavemente. La miré y, con seguridad, sus ojos estaban cerrados y ella dormía tranquilamente. Su capucha todavía estaba arriba y encima de su cabeza, así que ella parecía una niña inocente, alguien que no bebía y mucho menos iba a fiestas.