One Shots Jerrie

Only You 3/3

"¿Estás segura de que no quieres despertarla?" Ellie le preguntó a la chica morena.

Jade estaba terminando de empacar todas sus cosas. Habían pasado solo un par de días, pero maldita sea, no se sentía bien. Una prueba de eso estaba allí, luchando por cerrar el último de sus bolsos, luciendo ridículamente adorable con su sudadera con capucha de gran tamaño y sus pantalones que la hacían ver aún más pequeña.

"Ella no quiere que me quede, Ellie. Y además ... ¿qué más tengo que hacer aquí?"

"Bueno ... podrías hablar con ella..." Sugirió la rubia.

"Tal vez" Concedió Jade. "Pero no ahora"

Cuando terminó, sacó un papel doblado de su bolsillo y lo miró.

"¿Puedes darle esto, por favor?" Preguntó ella, y se la entregó a Ellie.

"... ¿No quieres sellarlo?" la chica le ofreció.

"No, está bien. Confío en ti" Se encogió de hombros. "E incluso si la curiosidad te mata, puedes leerlo. Ya te hablé de eso ... es una tontería que no tuve la oportunidad de decirle ..." Murmuró, frotando la parte posterior de su cuello.

Ellie recordó haber escuchado de su prima todas estas grandes cosas que Jade había hecho por ella, por lo que fue terriblemente injusto escuchar la historia que Jade le confió el día anterior; Casi anoche, el destino le había jugado un mal giro a la pobre chica, así que lo menos que podía hacer era darle su palabra.

"Me aseguraré de que lo reciba"

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Perrie estaba acostada en su cama, mirando al techo. Los pensamientos habían sido de su compañera más leal desde la noche anterior, solo dejándole suficiente tiempo para dormir, porque tan pronto como abrió los ojos, volvieron a ella, atacándola sin piedad.

Vinieron y se fueron, la mayoría de ellos preocupados por cómo no se había dado cuenta antes de que Jade estaba enamorada de ella. Jade siempre había sido una buena amiga para ella, era tan especial para ella; le dio consejos, la escuchó y la apoyó en todo.

¿Podría ser por lo íntimos que siempre han sido? Tal vez. Ella no podía explicar cómo es que lograron ese nivel de confianza, pero la verdad es que Jade siempre ha estado allí para ella.

Incluso desde el principio.

"¿Cómo se ve esto?" La rubia solicitó una vez más, pero mostrando un nuevo atuendo.

"Te ves bien con todo" Jade repitió una vez más también.

Perrie estaba revisando toda su ropa en su armario, en el departamento que ellas dos alquilaban.

"Ugh, suenas como mi mamá" La pequeña rubia puso los ojos en blanco. "¡No ayudas!"

"¿Has pensado que tal vez es porque eso es verdad?" Sugirió la morena.

"... ¿Qué eres mi mamá?"

"¡No!" Gritó la pequeña Geordie, desesperada, pero se rió y se dejó caer de espaldas sobre la cama.

"¡Jade, estoy tan nerviosa!" Perrie se quejó. "¡Es nuestra primera cita!"

"Lo sé, cariño, pero ¿Qué quieres que haga?" Ella replicó.

La rubia pensó en la respuesta de Jade como una oferta, en lugar de una pregunta retórica.

"... ¿Y si le digo que traiga a un amigo y tú puedes venir conmigo?"