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Narra Aaron

No me creo que le haya dicho a Anahí que la quiero, ahora se ilusionara más conmigo, nunca antes he sido tan sincero con alguien, con nadie me he desahogado de todo lo que he pasado y con ella lo he logrado en tan solo dos meses, es muy rápido.

-Cual es tu pasatiempo favorito.- se pone una de mis camisas.

Mi pasatiempo favorito es estar contigo mujer hermosa.

-Creo que ir a lugares con bastante naturaleza, me ayuda mucho a despejar la mente.- hago la cama.

-Se me ocurre una idea muy buena, la mejor.- se muerde el labio.

-Por tu cara supongo que es demasiado buena.- la tomo contra la pared.

Me toma del cuello y junta nuestros labios.

-Mi familia tiene una casa en el lago, es preciosa hace dos veranos que no vamos, está en un pueblito pequeño lejos de todo el ruido de la ciudad.

-Eso suena muy genial, pero para que me lo dices.- la miro dudoso.

-Que tal si tú y yo nos vamos el fin de semana allá estaremos muy solos, no te arrepentirás, la pasaremos increíble, tenemos caballos, casi no hay gente.

-No lo sé, no quiero dejar a mi hermana sola.

-Vamos por favor sí.- me hace cara de perrito.

-Bueno me has convencido cuando dijiste que estaremos solos.- hago un chupón en su cuello.

-Genial, mis padres deben estar muy preocupados por mi, luego piensan que el ladrón me rapto.- comenta riendo.

Su sonrisa es tan hermosa, haría lo que fuera por ella, incluso matar.

-Pues estas con el mejor ladrón que puedes encontrar en todo el mundo, yo te protejo.- abro la ventana.

-Es verdad lo que me dijiste hace un rato.- me abraza por la espalda y besa mi cuello.

La verdad es que me obsesione demasiado de ti Ani, pero soy tan cobarde que no te lo diré porque no te amo.

-No lo recuerdo.- comento inocente.

-No me tomes el pelo Aaron.- toma fuerzas y me lanza contra la cama

-Y si lo hago mmmm que me harás, me matarás.

-Te mataré, pero a besos.- se sube sobre mi y me come la boca.

Con ella solo me descontrolo, tengo que detenerla.

-Vamos a hacer el desayuno, tengo hambre.- me separo de ella.

Me queda mirando con cara de enojo.

-Si también la tengo.- mira de pocas ganas.

Río ante su cara, quería seguir basándome, fue de decepción.

Aunque Anahí sea delgada y alta, tiene una cintura tan hermosa.

-Que hay aquí para preparar.- abre el refrigerador.

-Solo tengo lo esencial, vengo muy poco a esta casa.- busco un cuchillo para picar frutas.

-Te gustan los panqueques.

-Los amo tanto como a mi moto.- la molesto sonriendo.

Narra Anahí

Prefiero que diga los amo tanto como a ti, que tiene esa moto que yo no tenga, que tengo que hacer Aaron para que te des cuenta que me encantas demasiado, eres un completo estúpido, solo me haces sufrir.

-En que piensas.- hecha el manjar a los panqueques.

-Solo pienso en tonterías sin sentido, alguna vez te has enamorado de alguien pero esa persona nunca se da cuenta de lo que el otro siente y aunque lo odies lo sigues amando aún mas.-  lo miro fijamente.

-No me ha pasado, solo me he enamorado una vez y creo que fue la última.- comenta con voz frío.

Maldito, amame a mi, yo te quiero estúpido.

-Que es lo que tenemos nosotros.

-Pasión y lujuria, creo.

-No sientes absolutamente nada, ni siquiera algo de cariño.

-No nada, contigo solo me descontrolo, me provocas Ani, te quiero besar ahora mismo. 

Como me dice eso, solo lo provoco y yo como una tonta ilusionada creyendo que me estaba empezando a querer.

-No Aaron, estoy cansada de esto, que discutamos y luego nos deboremos en la cama, me cansa, creo que tomaré tu idea, le daré una oportunidad a Alex haber si me olvido de ti.- escupo con rabia.

-Bien, como tu lo decidas, tú sabes lo que haces con tu vida, es cosa tuya.

-Me debo ir, ya es un poco tarde.

-Andate, pero te apuesto a que en menos de un mes, tú estarás de nuevo siendo mía.- dice con su maldita sonrisa.

-Ya lo veremos Aaron, eres un estúpido incomprendido.- salgo dando un portazo.

-Te apuesto mi moto por la tuya.- me detiene.

No sería una mala idea.

-Acepto, para que veas que te olvidare, me hace falta una moto así.

-Te puedes comprar la moto que quieras Anahí, pero como lo pijos son así, siempre lo quieren tener todo.

-Tu me propusiste la apuesta, mejor anda a dejarme no quiero seguir a tu lado.

-Me das risa Ani, en la mañana me pedías que te lo hiciera más rápido y ahora no me quieres ver, todos las mujeres son iguales.- busca las llaves.

-Está bien que tengas tanto rencor, pero de verdad que eres la peor personade todas, eres un bipolar.- elevo la voz.

-Desquitate conmigo el próximo fin de semana, de seguro ni vamos a dormir de lo bien que la pasaremos, ¿eso queda afuera de la apuesta?.

-Tú lo has dicho, pero si voy a estar con Alex, no nos hablemos y dejemos ese fin de semana para lo que sea, además sigo enojada contigo, te odio.- golpeo su hombro.

-Subete luego a la moto.- cierra la casa.

No digo nada y me subo a su amada moto, ojalá no me hubiese enamorado de este hombre tan estúpido.

Eres Un Estúpido Pero Te AmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora