Eres Un Estúpido Pero Te Amo

CP40

Narra Anahí 

Me doy vuelta y joder, caigo de la cama de espaldas, quedo tendida en el piso mirando el techo, no ha dolido tanto ya que la alfombra es muy cómoda, Aaron duerme de lo más tranquilo, me levanto del piso y tengo que correr al baño a vomitar, de seguro ha sido el alcohol que tomé anoche.
Me saco la polera de mi estúpido, entro en la ducha, no se en que pensaba anoche cuando se me ocurrió ir al lago, fue lo mejor, adoré eso, quiero más momentos así, me la pasé muy bien, además que anoche volvimos a hacer el amor a eso de las 3 de la madrugada.

Salgo con una toalla envuelta, me cepillo el pelo con calma, lavo mis dientes, entro en la habitación y abro las cortinas.

-Me encanta despertar con una vista así y más aún con el lago de fondo tan lindo.- me tira un beso.

-Los besos no se tiran, se dan.- me afirmo en la ventana a mirar el lago.

-Ven a mi lado.- se acomoda el pelo.

Camino hasta la cama y me siento, me hace cariño en la cabeza, paso mi mano por su torso, me encanta esa moto en llamas.

-Tienes hambre.

-Si y mucha.- muerde su labio.

-Me visto y vamos a comer.

-Tengo, pero ti.- me gana sobre él y me comienza a besar, tira de mi labio.- Me encantas, esa toalla te está estorbando.

-Venga pero uno rápido.- saco del mueble un condón.

-Así me da gusto.- me da vuelta quedando sobre mi.

Ojalá todos mis despertar sean así de buenos y entretenidos.

****

Pico fruta para hacer un desayuno saludable, Aaron se está duchando, lo bueno es que ninguno de los dos se enfermó, son las 9 de la mañana quiero que vayamos a andar a caballo.
Separo dos porciones de fruta con igual cantidad, a la mía le hecho crema, me encanta esto.

-Si que haz quedado guapo.- lo veo entrar en la gran cocina.

-Se que te vuelva loca.- me da un beso.

-Toma la fruta, quieres yogurt o crema.

-Crema por favor, ahora entiendo por qué estas tan delgada, comes muy saludable, bueno y como comes esta carne es mejor.- se indica a él.

-Vale esa carne es mas placentera diría yo.- depósito un beso en su cuello, huele tan bien.

Nos deboramos toda la fruta, lavo los platos.

-Voy a ver la casa por fuera, el jardín es hermoso, como es que tienen tan bellas flores si casi no vienen.

-Hay un chico que viene en la semana a ver la casa y se encarga de todo, es del pueblo.

-Entiendo, supongo que vamos andar a caballo o me equivoco.- cruza sus brazos.

-Pero claro que si, los puedes traer, los lazos están en la parte de atrás, tienes que traer el caballo color chocolate y el de color café claro.- le indico.

-Que pasa si te digo que nunca he andado a caballo.- se pone la mano en el cuello.

Creo que tendré que hacerlo todo yo, mi tío Martín me enseñó todo de caballos.

-Bien acompañame.- camino hacia la parte de atrás.

Tomo los lazos y le paso uno a Aaron, veo los caballos, se forma una gran sonrisa en mi cara, le debo mucho a mi regalon.