La hija del Presidente (Editando) ✅

Capítulo Nueve (Editad

Sophia aún no ha comido nada, ya está debilitada por los golpes y la falta de líquido. Sigue en el mismo estado de como la dejaron hace 4 horas. La puerta se abre y se pone en alerta.

—Es hora de cenar, zorra —dicen Sebastián y Robert entrando a la habitación.

—No tengo hambre —responde Sophia, que está en el piso con la bolsa en su cabeza y un vestido de flores que ellos le dieron luego de arrancarle la ropa.

Ellos le tiran la comida en el piso y ahí la dejan sin ningún remordimiento.

—¡Cerdos! —grita Sophia.

Robert deja que Sebastián salga y se acerca a Sophia. Acaricia su cabeza por encima de la bolsa que trae puesta para que no vea nada. Aunque ya ella los vió.

—No me toques —dice llorando.

Robert acaricia sus piernas y sujeta más sus manos para que no pueda moverlas. Baja sus pantalones y se arrodilla delante de Sophia levantando su vestido.

—No me hagas nada, ¡déjame por favor! —dice llorando y retorciéndose en el suelo.

Robert intenta penetrarla, pero no le he muy fácil.

—Con que eres señorita —dice mirándola con deseos.

La observa y dice:

—Seré el primero en comer pastel. ¡Felíz cumpleaños a mi! —Y le penetra con rudeza.

Sophia grita muy fuerte, siente que se le desgarra el alma. El imbécil de Robert sigue dentro de ella haciéndole daño y dejando su cuerpo marcado con rasguños.

Se marcha sin acabar y la deja destrozada y atada en el piso.

[...]

Cristina está sentada a la mesa con su madre Elena Castro y llega José el guardaespaldas. Cristina rueda los ojos y lo ignora.

—Señora, necesito decirle algo —dice mirando a Cristina.

—Dime, no importa que mi hija sepa —dice limpiándose los labios con la servilleta de tela.

José lo piensa tres veces y traga en seco...

—La señorita Jackson; ha sido asesinada.

—¡¿Qué?! No, no,no mi amiga no por favor —dice entrando en un trance.

La señora Castro se acerca a ella, la abraza y le pregunta a José que como lo supo y él le explica lo de la ropa.

Su madre trata de calmarla hasta que se queda dormida.

[...]

Lucía está acostada en su habitación, su madre entra y vuelve a salir, cree que no es un buen momento para decirle a su hija lo sucedido con su mejor amiga. Empeoraría su estado.

—Mami escuché en las noticias que Sophia está muerta —dice Nataly entre llantos mientras entra a la habitación.

—¡No! —Grita Lucía desde la habitación. Escuchó a su hermana que estaba afuera justo en la puerta.

Sus gritos son ensordecedores, su madre la abraza y agarra sus manos para que no siga halándose el pelo con desespero.

El presidente cargado de furia decide llamar a la única que persona que está detrás de todo esto. Se asegura de que nadie lo esté viendo y marca el número.

Llamada

—Hola mi querido presidente. — Responde Roko mientras toma de su copa de champán.

—Se muy bien que fuiste tu, me la vas a pagar hijo de puta —dice con el ceño fruncido y lanzando su celular a un mueble.

Fin llamada.

HolisS

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BesosS.