—El joven Bieber presenta un hombro dislocado, tres costillas rotas, múltiples hematomas a lo largo de todo su torso, y al presentarse una inflamación debido a un golpe en la cabeza, para evitar muerte cerebral, se le ha inducido a un estado de coma.
Las palabras del doctor entran a mis oídos, dejando a su paso tristeza y melancolía.
Después de descubrir que me encontraba en la habitación de Justin, mi hermano pidió hablar con los médicos del mismo, y éste nos acaba de dar una noticia que me deja postrada en mi sitio:
Justin está en coma.
—¿No hay manera de saber qué tanto se demorará en despertar?—Jessica dice a mi lado izquierdo, con notable preocupación.
—Lamentablemente no, cada persona es diferente y no hay manera de determinar eso. Pueden ser días, semanas, meses sin que él despierte.
—¿Qué posibilidad hay de un posible traslado? Ya sabe, Justin no es de acá, y su familia está en América, ¿es recomendable que viaje en ese estado?—Daniel, quien con uno de sus brazos sostiene mi cintura, le pregunta al médico, el cual no demora en responder.
—Ya nos hemos puesto en contacto con su manager, y hemos quedado en que el joven será trasladado a un hospital de Los Angeles donde podrá recuperarse.—Daniel asiente.
Con una de mis manos anclada al hombro de mi hermano mayor, volteo mi campo de visión al chico en la camilla, lleno de mogollones y con un labio roto.
Mis ojos se llenan de lágrimas y se cierran rápidamente, para evitar que las mismas salgan.
¡Dios mío, que pesar siento por Justin!
No tengo ganas de decir nada, ya que mi estado no me lo permite, pero al darme cuenta de algo que no deseo que suceda, en voz muy baja pregunto.
—¿Es posible que pierda la memoria?
Me aterra pensar que se olvide de mi. Peor aún, que se olvide de él mismo, de su familia, de su carrera.
—Si señorita. Normalmente en estos acontecimientos, mientras menos tiempo demore el paciente en coma, menos recuerdos se pierden, ya que el cerebro deja de trabajar poco a poco, llevándose a su paso la memoria. Pero no se enfoque tanto en eso, ya que los recuerdos, en su mayoría de veces, se recuperan.
No me importa que pierda la memoria. Yo estaré allí para él.
Después de otro rato en el que el médico explica cosas a mi mamá, a mi papá (que llegó no hace mucho) y a mi hermano y su novia, nos vamos a la habitación que me han dejado a mi en el hospital.
Varios toman distintos caminos: mamá va a registrarme fuera del centro médico, y Jessica y Daniel no se a donde se van, pero al final quedamos papá y yo en el cuarto.
Al principio nos quedamos en silencio, mientras yo me acurruco en la camilla, abrazando la acolchada almohada a mi lado, y él se sienta en el sofá con sus codos en sus rodillas.
Me mira durante un tiempo, en el cual yo veo a la nada, antes de dirigirme la palabra:
—¿Cómo te sientes, hija?—Con una mirada triste, yo respondo casi en un susurro.
—Bien, papá.—No soy la que está inconsciente en una cama, pienso.
Veo como se levanta del sofá, y se sienta a un lado de mi camilla, tomando una de mis manos y acariciando mis dedos.

ESTÁS LEYENDO
Soulmates ~JB~
FanfictionHay dos palabras que ocupan la mente de Ann Williams la mayoría del tiempo: Justin Bieber. Al igual que toda belieber allí afuera, su más grande deseo es abrazarlo, hablarle y conocerlo detrás de las cámaras: "Este es un nuevo año, y esta vez, mi su...