Life ||Jack Frost Y Tú||

1. La chica del bosque

Jack.

—Buen tiro, Jamie.— Dije limpiando la nieve de mi sudadera.

De nuevo, el invierno había llegado a Burgués. Había pasado un año desde que me convertí en un guardián, desde que Jamie y sus amigos por fin lograron creer en mi. 

Después de 300 años, dejé de ser un fantasma.

 — ¡Sofie! ¡Eso es trampa!— Se quejó Jamie cuando Sofie, aprovechando que estaba distraído, le había lanzado una bola de nieve directo a la cara.

— ¡Gané!—Gritó alegre.

— Sofie, Jamie, hora de comer.

Me despedí de ellos y se adentré en el bosque. Distraído, tocaba con mi cayado algunos árboles, llenándolos de escarcha, caminé al lago congelandolo.

— ¡Vamos! ¡No seas agua fiestas!— Dijo una voz, pero... Se escuchaba más profundo en el bosque. 

¿Había personas que se adentraban tanto en el bosque?

  — ¡Esto es muy divertido!— Volví a escuchar.

Picado por la curiosidad me acerqué hacía donde se encontraba la dueña de la voz, porque sí, era la voz de una chica. Las risas no se dejaban de escuchar, parecía que se estaba divirtiendo bastante. Cuanto más me adentraba en el bosque mis pies se hundían mas en la nieve.

Al atravesar con dificultad lo que parecía ser una barrera de árboles, pude verla. Era una chica, una chica que aparentaba mi edad, su cabello era extrañamente blanco, y corto, ni siquiera le llegaba a los hombros, su piel era pálida, casi como la mía y sus ojos azules, traía puesto un vestido holgado blanco que la cubría hasta sus tobillos, llevaba una cadena dorada en su cintura y... ¿Estaba descalza?

Me quedé viéndola en shock mientras ella hacía ángeles de nieve, riendo igual a como lo hace Sofie cuando esta muy feliz.

Al acercarme un poco más sin darme cuenta pisé una rama, haciendo ruido.

Ella se levantó de repente, su sonrisa desapareció y se levantó rápidamente sin dejar de mirarme.

Un momento... ¡¿Ella puede verme?! 

Avancé un paso hacia ella, pero retrocedió un paso, asustada.

 — Espera, no te haré...— Y antes de que terminara de hablar, ella había salido huyendo.— ¡Espera!

¡Ella podía verme! Estaba a punto de ir detrás de ella cuando escuché la voz de Jamie, llamándome. 

Observé por última vez el lugar hacia donde la chica había huido y regresé con Jamie. 

  —¡Jamie! En el bosque, había una chica... Ella, ella pudo verme.— Dije emocionado.

Debía encontrar a esa chica. Ella ya no era una niña, y aun así creía en mi. No podía salir de mi sorpresa. Tenía que conocerla, saber su nombre.

— Eso es genial Jack.— Dijo con una sonrisa, pero no duró mucho.— Pero, ¿En el bosque?

—En una de las partes mas profundas.

— Eso es extraño... Las personas del lugar no se adentran mucho en el bosque.— Jamie frunció el ceño.— ¿Y si...? No, no lo creo.

— ¿Que cosa?

No tuvo tiempo de contestar, de repente en el cielo se observó la aurora boreal. Los guardianes tenían que reunirse.

— Después hablamos Jamie, tengo que irme.—Tenía que apresurarme, así regresaría más pronto y tendré más tiempo de buscarla.

**

—Wow, wow, wow, ¿Jack Frost llegando temprano a una reunión de los guardianes?—Se burló el canguro de pascua al llegar y encontrarme.—¿Acaso estás enfermo? ¿Te sientes bien?

—Yo pensaba que no te importaba cangurito. Eso es halagador.—Sonreí cuando hizo una mueca y se alejó.

—Hola Jack, tiempo sin verte, a ti y a tus dientes.

—Tooth ya déjalo, no puede hablar.

"Gracias Norte" Le agradecí mentalmente cuando Tooth sacó sus dedos de mi boca.

—¿Para qué la reunión, Norte?—Pregunté.

Frunció el ceño y caminó hacia el planetario con las luces de los niños que creían en nosotros.

—Algo extraño ocurrió en el taller hace unas horas. Justo como hace un año... Sólo que...

—¿Pitch Black regresó?—Preguntó Tooth interrumpiendo.

Norte negó.

—Al principio pensé que se trataba de él... Pero después...

De repente, el planetario comenzó a llenarse de arena negra. Los yetis corrían de un lado a otro protegiendo los juguetes del fuerte viento. El planetario se detuvo y se escuchó una risa.

La risa de una mujer.

Después de eso todo volvió a la normalidad.

—Justo a eso me refería.—Habló Norte completamente serio.

—¿Qué creen que...?—Conejo dejó de hablar y todos prestamos atención a meme, que sacudía a un elfo para provocar ruido con el cascabel de su sombrero.

Señaló al techo.

El hombre de la Luna.

Próxima actualización: Jueves.