SAGA KING 3

CAPÍTULO 5

SUEÑOS CUMPLIDOS

¡Embarazada!

Una noticia demasiado fuerte para asimilarla por unos minutos. Sus ojos estaban sobre sus zapatillas color crema que se movían a cada paso que daba, de pronto se detuvo mirando la calle como si nunca hubiese visto un lugar tan concurrido. La gente pasaba  a su lado empujándola, hasta rozando su brazo. Levantó la mano y frotó el brazo opuesto como si el roce le doliera. Gimió y recorrió con sus hermosos ojos de gata el lugar y fue casi corriendo hasta el parque cercano que agradecida estaba sólo a unos pasos.

Camino a grandes zancadas. Era como si flotara sobre el duro piso hasta que llegó a una banca y se dejó caer sin importarle que su bolso se arrastrara por el piso de cemento.

¡Estaba embarazada! ¡Esperaba un hijo de Dallas King! ¡Un hijo del hombre que amaba! Parpadeó conmocionada mientras pensaba en lo que ahora sucedía y... ¡Dios! Una sonrisa empezó a dibujarse en su rostro y con la mano libre cubrió su vientre aún plano pensando que en su interior había vida. Una muy diminuta vida y que ella era la que tenia que proteger por...

¡Dios, dios, dios! Al fin un brillo en su vida de trabajo y soledad, bueno, ahora no se sentía tan sola, Dallas estaba a su lado y después de tanto tiempo podía sentir que al fin existía alguien que estaría junto a ella y que pronto se uniría un nuevo miembro que les uniría más.

Una sonrisa apareció en u rostro mientras miraba a los niños que revoloteaba de prono a su alrededor. Pronto uno más se uniría a ellos.

Permaneció relajada el resto de la tarde olvidando responsabilidades y preocupaciones. No quería que nada ni nadie le robara esos momentos. Necesitaba la paz que le proporcionaba hacer realidad un sueño muy oculto en su corazón.

*

La banda estaba tocando mejor que nunca. Dallas nunca se había sentido satisfecho en todos esos años como ahora. Al fin sus sueños estaban a punto de cumplirse. Convertirse en un músico famoso y que sus canciones fueran escuchadas por el mundo entero y ahora que estaban nominados a esos importantes premios, el mundo estaba a punto de reconocer los años de trabajo y esfuerzo.

Raspó con mucho más ímpetu las cuerdas de su guitarra y se dejó llevar por los sentimientos que emanaba de la melodía. Aquel esfuerzo fue la clave para que sus compañeros le siguieran igualmente emocionados por lo que estaba pasando con ellos.

Inclinó su torso sujetando con seguridad su instrumento y terminó el solo con notas largas que lo llevaron a un climax y lo hizo explotar en el espacio dentro de su mente.

Los aplausos lo sacaron debe su trance y una sonrisa se dibujó en sus labios. Se incorporó y abrió los ojos encontrándose con los de sus compañeros y unos azules muy parecidos a los suyos.

- ¡La mejor interpretación del año! - Exclamó Roger palmeando su hombro emocionado -, si la presentación es algo similar a el ensayo van a ser la sensación de la noche.

- Definitivamente estas inspirado Dallas - dijo Charlie, el baterista con una sonrisa enorme.

- Estoy seguro que todo se debe a la hermosa rubia que te tiene enamorado - bromeó Sam dándole una palmada en la espalda.

No respondió a las palabras del bajista, sólo sostuvo a su cuerpo la guitarra y pensó en la bella mujer que estaba a su lado y lo afortunado que era por ello. Asintió a sus demás compañeros y caminó hasta donde estaba el pedestal de su instrumento. Apartó el largo flequillo de su ojos y limpió un poco el sudor con la orilla de su camiseta roja.

- Tatiana va a estar orgullosa de ti - le dijo la voz de su primo tras él.

- Todo lo que hago siempre voy a hacerlo para que Tati sienta que nunca voy a defraudarla - movió la cabeza hacia la derecha vislumbrando a su primo de reojo.