Capítulo 8

24 2 0
                                    

Al entrar me giro en dirección a la camilla de mi madre noto que hay un hombre delgado, -demasiado delgado- vestido con una bata de levantar café que se encuentra sentado a su lado. A medida que me acerco voy reconociendo los rasgos, pero no estoy segura de sí es el, hay una diferencia abismal entre quien recuerdo y ésta persona que está frente a mi, no me convenzo hasta que levanta la vista y me mira sonriendo. Haymitch.

-Hola preciosa...

-Hola,Haymitch realmente encontrarte aquí es una sorpresa. Sinceramente creí que estarías igual que en el 13 con camisa de fuerza, aislado y odiando todo lo que no fuera una botella de licor.- digo acercándome a la cama y tomando asiento junto a él. Haymitch hace una mueca al recordar.

-bueno, creo que allí eran un poco más neuróticos, en este lugar al menos sirve un poco el ser popular y el mentor del sinsajo aunque al principio no fue nada fácil. -me responde levantándose de la silla y acercándose a mí.

-si- definitivamente lo eran, y entiendo a lo que te refieres contesto y recibo su incómodo abrazo, nunca fuimos ese tipo de personas. Peeta es quien me ha ayudado a cambiar ese aspecto.

-¿Como está?-me pregunta refiriéndose a mi madre.

-Tienen que llevarla al Capitolio.- Digo mirando a mi mama, Haymitch la mira a ella y luego a mi, se da cuenta inmediatamente por mi ceño fruncido que la situación no me agrada nada.

-Eso no puede significar nada bueno- yo solo asiento no hay nada que quiera agregar a esa declaración

-¿tú como has estado, Haymitch?- pregunto tratando de desviar la conversación. Después de todo el tema del capitolio ya es un hecho, no tiene caso seguir hablando de ello si puedo evitarlo.

-estupendamente querida, ¿que no me ves?-y sé que lo hace para subirme el ánimo, así que le regalo una pequeña sonrisa, pero al verlo tan delgado, tan diferente al Haymitch que conocía que es difícil creerle.

-en serio, ¿cómo estás?

-Mejor de lo que crees cielito. De hecho no tenia la menor idea de que estabas aquí hasta hace un rato. Sólo venía a despedirme de tu madre,ella fue una cara amable y conocida cuando más lo necesité. Pero dada su situación creo que lo mejor es quedarme aquí ¿no te parece?- Asiento porque después de todo tiene razón, su compañía y consejo nunca me ha sobrado.- por cierto, no he visto al chico ¿acaso no vino Peeta contigo?

-No Haymitch, el no esta aquí. Aunque ya no estoy muy segura a estas alturas de que esa haya sido la mejor decisión.

Durante la siguiente hora y media, lo pongo al tanto de todo lo que ha pasado en el doce durante sus casi 10 meses de ausencia. Le cuento que ya casi han terminado de construir la nueva fábrica de medicinas, también que Sae y su nieta han cuidado muy bien su casa y de sus pavos, y por último llego a la parte mas densa de la conversación, las alucinaciones de Peeta. No tengo que ponerlo al tanto de nuestra relación porque ha pasado aquí poco menos de un año y en ese tiempo no ha cambiado mucho nuestra situación. Así que le cuento las cosas más importantes, incluyendo la pelea que tuvimos antes de venir y por qué él no está aquí ahora.

-Entonces después de todo lo nuevo que me has contado sobre Peeta y tú, deduzco que debo ir por él y llevarlo al Capitolio, ya te encontraremos allá.- dice haciendo ademán de levantarse pero lo detengo.

-¿De qué estás hablando?- no puedo evitar ser más brusca de lo que pretendía,murmuro unas disculpas pero esto no que hace que su ceño fruncido desaparezca, por el contrario veo que su expresión se torna incluso molesta.

-Katniss, admite que lo necesitas en un momento como este, además de que sabes perfectamente que ambos estarán mejor y menos preocupados una vez que se encuentren juntos.No puedo creer que todavía no te des cuenta de la fortaleza del chico Katniss.- La verdad se que Haymitch tiene razón pero mi preocupación por el, normalmente supera mi racionalidad. Ahora comprendo que me negué a ver la realidad de la fortaleza que Peeta tiene ante las situaciones complicadas y difíciles. Haymitch que ignora mi reflexión interna continua hablando.

- Por mi parte pienso volver hoy mismo al doce, me dieron el alta y ya puedo marcharme. Hablaré con el muchacho y haré lo necesario para subirme con él en el próximo tren. Mientras tú te vas con tu madre para que puedan operarla pronto. No seas testaruda Katniss , ya sabes que tengo razón. Se levanta y se encamina hacia la puerta sin esperar ninguna afirmación de mi parte, al ver a Gale se gira y me mira con cara de pocos amigos.-Ahora estoy más seguro que nunca, definitivamente nos vemos en el capitolio nena.    

Real (Una Historia Pre-Epílogo)Where stories live. Discover now