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Capítulo 27: Fin del baile, hola casa

–Despertaste– dijo George sentado a los pies de ella en el sofá.

– ¿Qué hora son? –Tomo del puente de su nariz.

–Las 5 y algo de la mañana–

–Tengo tiempo– se levantó.

–Espera ¿No quieres desayunar? –

–No vendría a mal ¿pero de dónde sacaremos la comida? – Él se encaminó a la hielera probando que ella alzara una ceja interrogante.

–Está encantada– explico– ¿café para la resaca? –

–Si por favor– tomo la taza con cuidado de no quemarse.

Ambos se sentaron y desayunaron.

Tras terminar fueron a sus cuartos para sacar sus cosas e irse.

Ellos no irían en tren, si no, por chimenea.

Se encontraron en la sala común, ya todos se habían ido, se demoraron más de lo que pensaron en acomodar sus cosas.

–Creo que sería algo caballeroso si te dejo en tu casa–

– ¿Lo sacaste de una película muggle? – pregunto divertida

–Podría ser– sonrió mientras tomaba el baúl– pesa menos que el del verano pasado–

–Sabes que yo la puedo cargar–

–Lo sé, pero no quiero– se metió dentro de la chimenea– ¿lista? – tomo un puñado de los polvos.

–Por supuesto– tomo un puñado.

Ambos se miraron.

Se acercaron.

Ella se paró de puntas.


Él se encogió un poco.




–mansión Black...– susurro ella...






(...)

Remus, Sirius y Harry tomaban desayuno tranquilamente en el comedor.

–Profesor Lupin ¿me pasa la jalea? –

–Dime Remus Harry– le sonrió amable.

Era un hermoso momento, era como pertenecer a una familia.

*Puf*

Ante ellos alguien apareció en la chimenea.
A pesar de que estaban cubiertos con algo de hollín se pudo divisar bien a ese par.

–Ejem– se aclaró la garganta el licántropo.

Ambos chicos se separaron de inmediato muy avergonzados, sus rojos rostros los delataban.

–Señores Black, b–buenos días– saludo nervioso, Sirius solo alzó su taza en son de saludo.

Harry no pudo evitar reír.

–Gracias por traerme– el pelirrojo le entrego el baúl al elfo más cercano.

–Fue un placer mi sabueso– le robó un beso rápidamente, agarro un puñado de polvos y en un abrir y cerrar de ojos desapareció en el humo verde.

Simplemente ella suspiró enamorada mientras se apoyaba en la pared, pero al sentir tantos ojos sobre si cambio su mirada a sus familiares.

–E–esto, yo...– no sabía explicarse.

– ¿Harry me ayudarías con algo en la cocina? – pidió Sirius.

–Con todo gusto padrino– ambos se levantaron a toda prisa ocultándose en la otra habitación.

ʜɪᴊᴀ ᴅᴇ ᴡᴏʟꜰꜱᴛᴀʀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora