ʜɪᴊᴀ ᴅᴇ ᴡᴏʟꜰꜱᴛᴀʀ

•81•

Miren.

Se suponía y no debía subir nada hasta dentro de una semana pero...

Estoy tan feliz de haber llegado a las 30 mil lecturas que esto se los regalo🥀.

Son los mejores seres de este mundo y creeme que te amo🥀💗

Capítulo 81: El refugio

6 de abril

Un olor a sal marina se impregno hasta lo más profundo de su nariz.

Removiéndose incomoda, mas no por donde su destruido cuerpo se encontraba, si no, por las mismas secuelas de las anteriores torturas que la incomodaban enormemente.

Se sentía tan cansada...

Pasando abrir con pesadez los ojos, atraída más que nada a la salina fragancia relajante que se filtraba por las ventanas y se impregnaba en las paredes, sabanas y muebles.

En un primer momento quiso sentarse, más el punzante y ardido dolor emanado desde su hombro izquierdo ya colocado la llamo, notando como lo traía vendado y con una tela sujetando todo su brazo.

Rápidamente la imagen de ella estrellándose contra una columna de mármol para dislocarle el hombro al intentar salvar a Hermione y el ser múltiplemente puñalada por Bellatrix Lestrange golpeo su mente.

La sangre...

El dolor...

El sentir como metía su dedo, raspando con su uña su interior.

El simple recordarlo le causo un escalofrío.

Sin embargo no tanto como el comenzar a recordar las demas torturas y como mediante estas poco a poco fue perdiendo la cordura...

Desde obligando al Malfoy a torturarla a cambio de la vida de su madre, llevándola casi la locura extrema en ese indescriptible dolor capas de tocar cada uno de sus nervios, para luego detenerse al no poder soportarlo más, negándose y siendo sometido por el atrevimiento por el mismo padre y tía.

Casi de forma inconsciente llevo una mano a su clavícula.

Cerrando los ojos con fuerza al rozar las yemas de sus dedos por sobre la nueva cicatriz.

Los gritos mezclados.

Las carcajadas crueles.

El llanto agónico.

Y la punta de una varita enterrándose en la piel hasta chocar contra el hueso para que quedara tatuada dentro suyo siempre, en un recordatorio perpetuo para ella y una advertencia hacia todo aquel quien llegue a querer poseerla carnalmente. Como algún tipo de venganza en nombre de Snape de boca de Lestrange dado que a sus ojos era una doble cara, con su licantropía y su falso fanatismo y lealtad a Lord Voldemort, burlándose de ellos y ganándose la afinidad de todos para tan solo atrofiar sus planes.

Y eso sí que le provocaba un profundo sufrimiento.

Mas era lo emocional que físico.

Aunque la sangre expulsada de su cuerpo y la falta de serotonina que le propinaba una buena pieza de chocolate podrían ser culpables tambien.

Recordaba haber perdido demasiada.

No cuanta pero si el estar empapada desde su quijada por la patada que le dio el hombre lobo en el bosque tirándole dos dientes de atrás, hasta sus piernas al encontrarse tirada al lado de su primo.

Recordaba tambien como pese a encontrarse bajo la maldición cruciatus intentaron tomarse, más siendo atacados antes de esto, él con su tobillo torcido a la inversa.