El Rol Principal

Capítulo. 15 "Poder y control"

Capítulo. 15 “Poder y control”

Las miradas, el odio, ser enemigos. Una cosa es clara, entre Sauli Koskinen y Mía Stevenson no hay ningún tipo de relación amistosa. Esta de nuevo con Saana, su hermana mayor. Ella ríe sin percatarse de que el rubio atractivo me mira molesto. Devuelvo mi mirada a mi bolso y cierro los ojos. ¿Debería irme y hacer como si nada hubiera pasado? No quería irme porque Adam se encontraba aquí, pero no puedo seguir si Sauli y yo estamos en el mismo lugar, es frustrante. Me siento en constante conflicto con él.

Me paré de mi asiento para ir a la puerta de salida, pero alguien me detuvo. Una voz.

-¡Mía querida!—Saana se escuchó a lo lejos. Maldita sea.

Saana se acercó a mí rápidamente, dejando a Sauli atrás de ella. El se movía lentamente-- ¡Que alegría que estés aquí! ¿Has visto la escena? ¡Fue increíble!—dijo emocionada.

-Suuri, jälleen huomaamme Miss Lambert. Hitto, sinulla ei ole mitään muuta tekemistä? (Genial, de nuevo nos encontramos con la señorita Lambert. Maldita sea, ¿que no tiene otra cosa que hacer?)

Saana le dio un codazo. Sauli hizo una pequeña mueca de dolor— Saana että karkea, vittu (Que ruda Saana, vete a la mierda)

-Sinä rakastat minua, rakas typerys (Tu me amas, querido tonto)—Saana dijo riéndose.

Sauli volteó los ojos.

-Lo siento Mía, bien, de nuevo, a Sauli le encanta hablar en fines—le da una mirada de santa inquisidora. Perfecto. Me recuerda a Donatella—Pero no importa, ¿Cómo te ha parecido?

-Oh pues, ha sido genial—dije sin muchas ganas.

-¡Picarona! Vi cuando Adam quiso besarte—emitió una risilla—Se ve que tu y él se quieren mucho. Hoy en el café nos ha contado tantas cosas de ti.

Oh mierda. ¿Es enserio?

- Ah, ¿Si?

-Pieni New York ensin. Kullankaivaja (Pequeña neoyorquina sin esperanzas. Cazafortunas)

-¿Perdón?

Saana abre los ojos ofendida y le vuelve a pegar con la mano. Sauli ríe. Se me agota la paciencia. Saana de nuevo vuelve a su expresión normal. Trato de contener las ganas de abofetearlo.

-Si… nos cuenta se que conocen desde niños y que viviste en Nueva York—dice contenta.

Asiento con una sonrisa, pero no estoy tranquila. Sauli solo me mira sin decir nada. Vamos rubio, dime algo en español.

-Claro… bien—veo mi celular—Tengo que irme, no he arreglado unas cosas y…

-Mennä, se oli aika (Vaya, ya era hora)—Sauli susurra.

-¿Cuál es tu maldito problema Sauli?—suelto llena de coraje.

Saana me mira sorprendida. Sauli sigue igual. Da unos pasos hacia mí. Yo retrocedo uno.

-¿Crees que eres buena para Adam? ¿Enserio? ¿Tanto como para que el te elija? Tú sabes que preferencias tiene, y no podrás cambiarlo.

-¿Quién eres tú para amenazarme?

-Oigan…—Saana interrumpió. Los dos la ignoramos.

-Oh, créeme linda, no querrás saberlo.

-Y tu créeme, rubio deformado—Saana me mira disgustada—Que no te tengo miedo, y tengo los suficientes problemas como para tener que soportarte a ti.

-Eso no se notaba la otra vez, menos ahora. Adam se quedo conmigo.

-Coincidencia, eso es.

-¿Eso crees?—sonrió.