Capítulo. 29 "Juguemos"

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-¿Sigue ahí? Me está preocupando.

La voz de Donatella fue lo primero que escuché esa mañana. Era de día, al parecer. Eso creía. Todas las horas del día esta oscuro aquí.

-Habla con ella si tanto te preocupa.

-¿Cómo puedes sonar tan despreocupado? ¿No tienes curiosidad que le habrá dicho el desgraciado de Brad esta vez? Desde que llegó está así.

Recuerdo de nuevo su amenaza. Quiere lastimar a Adam.

-Habla con ella de una vez—contesta Mattt exasperado, débil.

No podía estar enojada con Matt. De alguna manera, lo entendía. Esto ya es demasiado para todos nosotros.

Cada vez que podía, me escabullía dentro de aquel apestoso y mugriento baño. Era grande, tanto para albergar una regadera, y los mugrientos azulejos revelaban lo viejo del lugar. Sea lo que fuera este lugar, era claro que nadie ha puesto un pie en años.

Algunos tímidos pasos me pusieron alerta. Posiblemente era Donatella, pero justo cuando escuché el paso más cerca todo se detuvo; al parecer Dona se había retractado.

-Descuida Dona, tendrá que salir de ahí algún día. Algún día—se ríe.

El comentario de Matt había sido tan deprimente que en mi aparecían las ganas de llorar. Su actitud pesimista estaba en aumento.

Donatella suspira exasperada.

-¿Qué quieres que haga, Matt?

-Sabes que no podemos hacer nada en este momento.

-¿No tienes miedo?

-Créeme, mucho más de lo que imaginas. Que tu hermano intente matarte en varias ocasiones es una jodida pesadilla.

Sin poder evitarlo más, salí del baño al principio con dificultad para parame. Al cruzar el umbral y verlos ahí sentados, débiles y con ojos medio cerrados, ya no pude evitarlo más.

-Hay que salir que aquí.

Matt fue el primero en incorporarse y caminar hacia mí con una expresión tan confusa que me hizo retroceder un paso. Centímetros más tarde, estaba frente a mí y ahora podía apreciar todo el daño que su hermano le había causado. Me provocó un hoyo en el estómago.

-Y no voy a apreciar tus comentarios negativos esta vez, Matt.

Me da una floja media sonrisa.

-¿Nos has escuchado?

-Todo el tiempo. Parecen pareja de casados, por Dios Santo.

Cuando fijo mi mirada en Donatella, está claramente preocupada. Se incorpora tan rápido como puede y se acerca hacia a mí.

-¿Por qué tanta discreción de tu parte Mia?

Bajo la mirada y suspiro largamente—Estoy preocupada.

-Ah ¿sí? ¿Qué te ha dicho el desgraciado aquel?

Como cientos de veces estos últimos días, me quiebro y comienzo a llorar.

-Le quiere hacer daño a Adam—apenas puedo articular—Donatella, tenemos que detenerlo antes de que le haga algo. No podría soportar si algo malo le sucediera. Y es inútil que él se esconda o se vaya lejos, Brad siempre podrá encontrarlo, como lo hizo con nosotros.

-Eso no va a suceder—Matt dijo en voz baja, roza mi hombro con delicadeza y aprieta su mandíbula— Tenemos que arriesgarnos esta vez.

-Sabes que eso va a ser un gran desafío, ¿verdad? No tenemos ni idea donde estamos, el aparato está perdido... hay hombres cuidando los alrededores...Es claro que alguno de nosotros...

El Rol PrincipalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora