Prohibido Enamorarse ©

Yo te esperaré [Final]

Y ahí estaba yo, con los nervios a flor de pié, con los ojos enrojecidos de tanto llorar, en chock, completamente en chock aun por la muerte de alguien a quien amé en el pasado y que su fin había sido un golpe para mi, pero aun más para Luisa. No podía creer lo que había pasado.

Estába en la sala de emergencias con mamá, Drake, Elena y Matías ( los padres de Tadeo) , Máx se había encargado de llevar a Alice y Luisa a casa , estaban mentalmente agotadas.

Mamá abraza a Elena tratando de Tranquilizarla, Tadeo estába en cuidados intensivos , no sabíamos que pasaba ahí adentro , Drake y Matías estaban sentados en silencio y yo, bueno yo no aguantaba las ganas de filtrarme entre los médicos y ver a Tadeo.

- Cariño deberías ir a descansar a casa, yo estaré con Elena y te mantendré al tanto de todo.-Dijo mi madre con preocupación-

-Mamá estoy bien, vale. No puedo irme a casa con esta angustia.
-Mamá besó mi frente y se quedó a lado mio. -Elena se acercó a nosotras.

- Sofia, ¿cierto?-Preguntó Elena con amabilidad, se veía agotada con unas ojeras pronunciadas.

-S..Si.- asentí.-¡Eres preciosa!
-Dijo tomando de mis manos pero su mirada reflejaba agonía.- Tadeo me ha hablado mucho de ti, ¿sabes? Él te quiere aunque no lo parezca.

Comencé a sentir ese nudo en la garganta que no te deja hablar.

-¡Y yo lo quiero a Él! -Dije en un hilo de voz.- Lo sé Sofía, se que quieres mucho a mi hijo, gracias por estar aquí.

Sonreí con desdén y un médico se acercó a nosotros.

-¿Familiares de Tadeo Madsen? Preguntó con libreta en manos.

Elena atendió rápidamente y anunció que era su madre.

-¿Cómo está mi hijo, doctor? Preguntó desesperada.

-Tadeo ha perdido mucha sangre, la bala perforó el Bazo, está luchando por quedarse aquí Sra Madsen, estamos esperando a que despierte, está muy débil y ya hemos pasado a retirar la bala y ha recibido transfusión de sangre a causa de que ha perdido mucha, estamos esperando a que reaccione a los medicamentos, hacemos lo posible. -Dijo finalmente.

Elena se soltó en llanto, mamá abrazó a Elena y por mi parte estaba a punto de caer de rodillas, mis piernas temblaban, mi corazón parecía salir de mi pecho y un miedo tremendo se apoderó de mi.

-¿Podemos verle?-Preguntó Elena en llanto. -El doctor se debatió mentalmente en si acceder o no.

-Esta bien, pero uno por uno.-Dijo el doctor y Elena fue la primera en pasar.

En ese momento me di cuenta que el no atreverme a reconocer mis sentimientos por él era una consecuencia al pensar que no podría verlo otra vez. Me había pasado dos años entero prohibiendo enamorarme, por mis miedos, mis inseguridades, mi frialdad y todo ello conllevó a encerrarme en una caja de cristal , sin poder recibir del amor que tanto necesito. El de Tadeo.

Pronto vi salir a Elena, luego a Matías y de último a Drake. Era mi turno de pasar a verlo, me preparé mentalmente y traté de tranquilizarme.

Entré a la habitación donde Tadeo estaba totalmente lleno de aparatos, sondas y una máscara de oxígeno en su rostro, me dolía verlo en ese estado crítico, no pude evitar soltarme en llanto.

Respiré entre cortada e intenté calmarme un poco, me senté en un banquillo que estaba a la par de la camilla, tomé una de sus manos y la pasé en mi mejilla.

-Vale, Ojalá puedas escucharme.
-musité.

-¿Sabes? He sido muy tonta, se que te he causado mucho enojo y hasta creo que te he sacado canas. -Dije acariciando su cabello. -Pero no sabes cuanto te necesito, a pesar de todo los encontronazos que hemos tenido, hoy puedo decirte que eres demasiado importante para mi, que extraño tus besos, tu sentido del humor y tus malos chistes.
-Dije riendo con los ojos llorosos.