—Te lo digo bro, que la profesora de romano incluirá sobre el plebiscito. Hizo lo mismo el año pasado y aplazó casi la mitad del salón—me decía Taylor mientras desayunábamos.
—No sé en qué tiempo estudiaremos el plebiscito, si ya tenemos que estudiar civil, constitucional y lógica jurídica, solo para la próxima semana— me lamenté.
—No quiero hablar de lógica jurídica. Nunca entiendo una mierda de lo que dicen—Taylor atacó su sándwich sin compasión.
—Deja de lloriquear que yo te prestaré esos apuntes. Concéntrate en civil que gracias a tu genial idea de armar un grupo de estudio, donde lo menos que hicimos fue estudiar pero si follar, ninguna de las chicas nos habla. Allí si estamos bien jodidos.
—Yo digo que vayamos esta tarde y roguemos.
—No puedo en las tardes, lo sabes y tú eres el que tiene que arreglarlo, fuiste el que llevó la botella de vino y propició todo. Así que asume tu problema y quiero los apuntes para mañana, sino bye bye apuntes de lógica— amenacé apuntándolo con mi tenedor.
Megan y Nicole se encontraban a nuestro lado enfrascadas en su propia conversación. Mi hermana estaba decidida a sonsacarle la persona con la que Nicole había salido en una cita, y Nicole no estaba cediendo ni un poco.
Un zumbido interrumpió la frase de Megan. En cuanto leyó el remitente, me tendió su teléfono volteando los ojos.
Un mensaje de texto de Corinne acababa de llegar para mí.
—Buenos días RA. Mi compañera pasará el fin de semana en su casa, así que estaré solita todo el fin de semana, a menos claro, que quieras hacerme compañía.
Tecleé la respuesta con rapidez: —¿Qué clase de persona sería si te dejase sola? Cuenta conmigo.
Sexo para el fin de semana: ¡Listo!
Llegó un nuevo mensaje con una foto de Corinne, donde lo que más destacaba eran sus ojos verdes y su 36D. Envié la foto a mi teléfono y la borré de la memoria del de mi hermana, antes de devolvérselo.
—¿Qué fue eso?— preguntó Taylor.
—Eso, soy yo haciendo "tú" trabajo—le respondió mi hermana.
Taylor lucía de verdad ofendido. Se llevó la mano al corazón y de forma dramática me preguntó: —¿Acaso no confías en mi gusto para conseguirte chicas?.
Rodé los ojos por su dramatismo: —La verdad es que después de tu fallo con pantis verdes, tengo mis reservas.
—No está dentro de mis funciones averiguar su árbol genealógico bro.
Después de un silencio que aprovechamos para terminar nuestros desayunos mi hermana continuó con su interrogatorio.
—Oh vamos Nico—insisitió haciendo un puchero—somos tus mejores amigos
Nicole volvió a negarse pero le llegó un mensaje a su teléfono y antes de que pudiese verlo, Megan se lo arrebató y se levantó de la mesa. Nicole no alcanzó a quitarle el teléfono antes de que Megan leyese. Los ojos de esta se desorbitaron y su boca se abrió de sorpresa. Nicole se sonrojó con violencia y se sentó con su cara contraída, como quien espera un sonoro regaño. Taylor y yo mirábamos la escena atentos.
—¿¡Andrea!?— le dijo mi hermana—Te dije que no, es una chica muy agradable como para que la uses y deseches Nicole. No pretendía hacerlo un reto para ti cuando te dije que no, pero no es justo con ella que la uses para volver a ponerte en pie después de lo de Taylor.
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Estúpido Nerd Amor.
Teen FictionLa vida de Megan Asper es la típica vida universitaria: la más popular envidiada por todas, buena fiestas y buen sexo; hasta que se topa con Alejandro Hott, un nerd que es inmune a sus curvas, su pecho prominente, sus caderas de infarto, su melena d...