Publicado: 09/ 02/ 2018
Editado: 11/ 09/ 2020
Confusión.
A la mañana siguiente con el sol apenas asomándose por el horizonte, Dipper se estremecía entre un profundo respiro, adormilado y con los ojos exhaustos se miraba en el sofá de la sala recostado sobre el brazo de alguien, se incorporó con algo de dolencia en las caderas y observó más certeramente el rostro del rubio, su cara era una mezcla de calma y burla, estaba sonriendo... La vergüenza lo lleno y se dispuso a ponerse de pie, pero Bill lo detuvo abrazándolo por la cintura y acurrucándose en su nuca, totalmente avergonzado Dipper se libero del agarre poniéndose de pie con un dolor punzante y una sábana rodeando sus desnudas caderas. Bill parecía confundido pasando la mano entre su despeinados cabellos.
— ¿Que te pasa Pinetree?
—Deja de jugar —desvia la mirada entre un suspiro — ¿Que tipo de broma pesada tratas de hacerme al traerme aquí? Iré... Ire a la habitación.
Tomando asiento debidamente el sofá, Bill bajo la mirada frunciendo poco a poco el ceño mientras Dipper se alejaba aferrándose a las cobijas en su cintura y sintiendo aún aquel dolor en las caderas. Aún adormilado Marco podía escuchar sonar su celular, se removió incómodo y tomo aquel móvil en mano para contestar poniéndolo en su oreja.
—Diga...
—Disculpe, pensaba solo dejar un mensaje... Bueno, el gerente me ha pedido informarle que hoy no hay necesidad de que se presenten a trabajar.
— ¿Mm? ¿Hicimos algo mal? ¿Cuál es la razón?
—Solo me han pedido que le informé eso... No creo que sea algo malo.
—Bueno... Está bien muchas gracias.
Al colgar la llamada giro la mirada notando como Star ya había invadido su espacio en la cama, algo alegre bajo y fue del lado de Tom metiéndose entre las sábanas para que el pelirosa lo abrazará, Tom no tardó mucho en hacer lo que debía, al sentir el calor de aquel cuerpo cerca suyo abrazo al castaño acurrucándose entre sus cabellos mientras éste dormía con una sonrisa en el rostro. Todos habían bebido mucho por primera vez, sería raro que alguno de ellos despertará antes del mediodía. Las chicas en la habitación de al lado daban vueltas en la cama turnandose para abrazar al demonio peliazul entre ellas. Bill subió con enfado las escaleras rumbo a su habitación encontrándose con el hecho de que su humano no estaba en aquel lugar, tomo sus cosas de baño y avanzó hacia el cuarto de baño encontrando a aquel castaño dentro secando su cabello e ignorandolo, exhalando un suspiro dejo la toalla sobre sus hombros y estaba dispuesto a salir hasta que Bill lo sostuvo del brazo pegandolo bruscamente contra la pared.
—Seria una estupidez que no recordarás nada.
Con molestia Dipper se soltó del agarre dispuesto a salir de la habitación mientras Bill sonreía entre una risa incrédula y molesta sintiendo un dolor en su pecho ante la indiferencia del castaño.
—En este momento Dipper Pine —mencionaba con enfado —Desde este momento no te desharas tan fácil de mi... ¿Oíste fuerte y claro PineTree?
Expresó con una voz tan grave y firme que causo que una corriente eléctrica recorriera la nuca del castaño haciéndolo estremecer, apenas la puerta se cerró con brusquedad, Dipper termino de cuclillas en el suelo, su corazón estaba acelerado y su respiración irregular mientras un dolor le llenaba la nuca. Bill comenzaba a ducharse, apenas mojaba su cabello cuando la puerta se abrió.
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Cada quien con su demonio
FanfictionDicen que la curiosidad mató al gato, pero seguro que el gato emprendió una increíble caminata por descubrir tal secreto. Tras la curiosidad, un simple juego trae consigo 40 dólares y dos sexys demonios, que llevarán a nuestros amigos por un raro y...