Feliz regalo anticipado de Navidad n.n
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—¡Abuela, voy a salir! —Anuncio tras buscar un abrigo y ponerme pantalones que no sean los del pijama.
—¿Marco el otro 1? —pregunta Ernie.
—¡No! —recuerdo que había marcado 9 y 1 tras oír el timbre.
—¿Va todo bien, cielo? —Susan se vuelve hasta la puerta, cruza una mirada con Shain y le dedica una sonrisa—. Hola, cariño.
—Hola, señora Blake.
—Oh, yo no soy Blake, ese es el papá de mi nieto. ¿Quieres una taza de chocolate caliente?
—¡No es necesario! —me interpongo entre ambos. Shain se cruza de brazos y con una mano se cubre una sonrisa socarrona—. Sa...Saldremos un momento. Enseguida vuelvo.
—Pero cariño, ¿a esta hora?
—Sólo será un momento, lo prometo.
—Déjalo Susan—grita Ernie desde su lugar—. ¡Para nosotros todo es tarde! A su edad, siempre es demasiado temprano.
Susan quita la llave de la puerta y me la pasa.
—Pero deberán ponerle seguro si...—empiezo.
Ella se vuelve hasta un abrigo colgado y saca otra llave idéntica.
—Tengo copias por las dudas. No le cuentes a tu abuelo.
¿Qué será "por las dudas"? Le doy un beso en la mejilla, me despido de mi abuelo y salgo con Shain.
Mientras andamos por el vecindario, le pregunto a mi acompañante de pelo azul:
—¿Y dónde vamos específicamente?
—Bah, por ahí.
—¿Por ahí?
—Sólo daremos vueltas. Necesitaba conversar contigo.
El aire se me entrecorta.
—¿De...qué? —murmuro.
Shain me mira de costado con sus grandes ojos negros. Es asombroso el modo en que resaltan en su piel tan pálida como la de un muerto.
—Esta vez, de mí—contesta—. Ya te he torturado antes para que me cuentes cosas que ya sé.
—Bien, entonces...
—Sin remordimientos, sólo quisiera aclararte que me parece bien si te gusta ese chico. Sólo me parece que estás mirando el lado equivocado.
Por un instante creo que me tirará los perros a su estilo, por lo que decido quitarme las dudas:
—¿Y cuál es el lado correcto? ¿Acaso lo hay?
¿Él?
—Dudo que exista un lado ideal—se decide—, sin embargo Steve Morgan juraría que no lo es, lo mires por donde lo mires.
—¿Conoces a Steve?
—Nop.
—¿Y por qué te autorizas a hablar así de él?
Le arrojo una mirada asesina y él también a mí. Una sonrisa con algo de indignación, sin las mejores intenciones, se le escapa.
—Vaya, si en verdad te gusta...
—¡NO! —le suelto. ¿Qué tan grave sería que algo así pudiese filtrarse en toda la maldita escuela? —. ¡NO, SHAIN!
—¿Por qué te pones de ese modo, Jimmy? En verdad, yo me haré a un lado si es necesario. Sin verdad tú y él...
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Los Colores de Jimmy
Teen FictionSólo hay dos clases de personas en el mundo: ☝Las que deben salir del armario. ✌Las que no. Y no encajo en ninguna de ellas.