Cartas a él

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16 – 03 – 2017



No te llegas a hacer una idea de lo que te amé.

Corrección, de lo que te amo. Eres y vas a seguir siendo importantísimo para mí, aunque tenga cincuenta mensajes de otra persona siempre voy a responder los tuyos primero, no prometo que siempre seas el primero en mi mente pero sí te aseguro que nunca te olvidaré.

No me enamoré de tu físico, si no del chico tierno que hay por dentro y que le cuesta demostrarlo.

Sé que hay una diferencia de ocho años de edad, pero la verdad es que ese insignificante número jamás me impidió amarte.

No sé si quiero una despedida o un hasta luego, porque mi mente quiere y necesita una despedida, pero mi corazón no quiere dejarte.

No sé porque escribo esto si jamás lo vas a leer. No me permitiría pasarte un sentimiento tan explícito como este.

Me encantaría poder tener el valor de hacerlo, pero no nos hablamos, ni siquiera nos cruzamos en los caminos. Es todo muy distinto, y por más que quiera olvidarte te juro que no puedo, te extraño; y mucho.

Aunque mi mente me diga que soy una tonta, estúpida y masoquista (que al fin y al cabo tiene razón) si me volvieras a escribir y me dijeras que harías las cosas diferentes esta vez, te juro que diría que sí, sin pensarlo, aunque luego doliera aún más yo lo haría, con tal de verte lo haría.

Siento que en vez de cerrar y dejar cicatrizar la herida, cada vez la dejo abrir un poco más y duele. Duele no verte. Duele que no me escribas. Duele que me ignores. Duele que solo te acuerdes de mi cuando necesitas algo.

Prometí antes de conocerte no volver a llorar por un chico, pero acá estoy. Llorando por vos.


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28 – 03 – 2017



¡Feliz cumpleaños!

Sé que tampoco leerás esto pero yo siempre escribo y bueno, esta es mi forma de desahogo.

Aunque algunas personas crean que me usaste, que es verdad, yo sé que eres lo mejor. Sé que dentro de ti hay un corazón gigante que está preparado para recibir amor, pero tal vez tu mente tenga miedo o simplemente ese corazón pertenezca a otra persona. Pero el punto es que me robaste el corazón, y lo quiero de vuelta porque ya no puedo amar a otra persona que no seas tú.

Si no te escribo es porque creo que el sentimiento no es mutuo, y al no ser mutuo me lastimo a mí misma. Pero el hecho que no te escriba no significa que no piense en ti. Es más, todo el tiempo pienso en ti. Y generalmente se me vienen recuerdos feos, de tus actitudes horribles, aunque a veces se me vienen recuerdos hermosos de abrazos, besos y frases tuyas que han quedado grabadas en mi memoria; pero automáticamente se nublan al pensar que todo eso era falso y que por eso me hice falsas esperanzas.

Sinceramente aun no entiendo qué te vi. No eres lindo, pero creo que fueron tus actitudes las que me enamoraron.

Espero que seas demasiado feliz y que jamás sientas lo que estoy sintiendo en este momento.

Prometí no hablarte y no pienso romper esa promesa, porque también me rompería el corazón.

Que pases un feliz cumpleaños.

El final es el comienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora