Azul → Bulma Brief

→ Beating Heart

Sus ojos se movían nerviosos dudando si en hacerlo o no. Su dedo tocó el pequeño botón para que el timbre comenzará a sonar por toda la casa, espero con impaciencia fuera de la casa, Goku lo miró desde el coche esperando.

Una rubia abrió la puerta con un semblante serio. La señora Brief lo miró con sorpresa. Vegeta tuvo que tragar el nudo de su garganta.

— Buenas tardes... ¿Está Bulma?

— Jovencito. Después de tanto viene ¿Eh?

Sintió el regaño de la señora. Miro a otro lado que no fuera el rostro de la madre de Bulma. Con trabajo y pudo tragar todo ese orgullo que tenía para venir a buscarla meses después. Escucho dos voces, una delgada y sabía de quién se trataba, la otra era más varonil y también ya la había escuchado hace tiempo, ese tipo que estuvo detrás de Bulma «Hit» apretó sus puños, haciendo que sus nudillos se tornen blancos por la presión y que sus uñas se encajen en la piel de la palma de su mano.

— Será mejor que venga otro día — murmuró controlando su rabia. La señora Brief suspiro.

— Espera — lo llamó — ¿Te irás ya? Es solamente Hit, una amigo de ella.

— No soy idiota — desató su rabia — Hit es cuando suyo para casarla ¿O me equivoco?

— No, tienes razón. Es un buen chico, la quiere. Pero viéndote así, es mejor partido que tú.

Vegeta dió un paso atrás, respiro profundamente tratando de no contestar mal a la madre de Bulma, pero esto ya era suficiente humillación. Ya. Estaba arto de la situación. Sintió el mareo cuando la rabia corría por su sangre, no podía seguir ni un minuto más aquí, le dió la espalda caminando hacia el coche.

La madre de Bulma se cruzó de brazos ¿Había hecho bien con decirle esas palabras? Entró en la casa, mirando que Hit venía hacia la salida. Sus nervios se pusieron de punta ante eso.

— ¿Ya te vas, Hit?

— Ya señora Brief. Fue un gusto estar con esta chica tan bella — Abrazo a Bulma. Su hija se removió un poco incómoda cuando hizo eso.

Bulma se quedo parada unos momentos mirando como Hit se iba.

— ¡Bulma! ¿Que comportamientos son esos?

— Mamá, tú me quieres imponer un amor que no se dará. Lo quiero como mi amigo y nada más. Si yo encuentro alguien más que Vegeta, será por mi cuenta no por la de ustedes ¿Si?

Su madre guardo silencio.

— Pues, él vino a verte hace unos minutos.

Confesó con lentitud. Estudiando las facciones de su hija conforme decía las cosas. Bulma se puso pálida, jugando con sus dedos molesta.

— ¿Por que no me avisaste? — preguntó en calma.

— Por que, ni siquiera son capaces de mantener una relación. No serán capaces de tener un hijo.

— ¡¿Y ustedes que saben!? Sé que piensan que soy una adolescente estúpida. Pero se lo que el amor, no pueden mandarme de esta forma.

— No me hagas ponerme firme, niña. Te he tolerado demasiado — Gritó su madre enojada, Bulma guardo silencio — Harás lo que yo te diga, ese jovencito no te conviene, he dicho.

Observó los mismo caprichos que antes hacia Bulma cuando no la dejaban hacer algo. El llanto. Volvió hacerlo, Bulma sollozo y frunció el entrecejo, esas eran las iniciaciones de las discusiones con su padre, que la defendía.