Pasados Pendientes TERMINADA (PP #1)

✔Capítulo 39.

Capítulo 39 "Dulce compromiso".

Nicolás.

En algunas ocasiones de mi vida lo único que quiero es tomar todo el papeleo que habita sobre mi escritorio y mandarlo a volar, que vuele muy lejos de mí ¡que vuele! Pero regreso a mí realidad en dónde Sam debe firmar algunos de esos permisos y yo debo colocar el sello de la empresa junto a mi garabato personal.

—Aún no creo en la posición en que estás Sam— elogie, exacto yo lo elogie.

Con el tiempo la madurez llego y supe digerir a bocados grandes que Chloe había elegido a ese pedazo de persona por sobre todos aquellos hombres con esteroides que la perseguían.

—En mi completa sinceridad siempre creí que yo sería su secretario— expresó en confianza.

—Cuando te contrate Chloe había creado una loca historia romántica gay— bufe. Chloe puede dejar libre su cabeza y crear alborotos en la vida real.

—Me comento sobre esa historia Yaoi— río.

¿Yaoi? Preferí reír de una forma amena así no tendría que abrir espacio a una nueva pregunta incómoda. La relación entre Sam y yo era estable laboralmente, gracias a Amy y parte de su psicología me ayudo a comprender que al igual que The Beatles; sólo hay que dejarlo ser. Sin darme cuenta esa relación que yo había confirmado cómo efímera se volvía a paso lento algo rutinario. Uno de los detalles que me falto comentar es que ambos somos padres; de distintas formas, pero lo somos, el desde un punto adoptivo y en mi caso desde un punto biológico, así que como buenos padres hacemos pruebas de los caramelos que nuestros hijos van a comer, el menú de hoy son anillos de dulce. Deliciosos, además tengo guardados unos en la guantera de mi camioneta para cualquier situación.

El teléfono de la oficina resonó de una forma llamativa, espere unos instantes a que Sam respondiera, pero mi cerebro logro atar cabos que él no atendería la llamada.

—Buenas tardes habla Nicolás Burrell— atendí con mi voz formal.

—Espero que tenga una agradable tarde señor Nicolás el motivo de la llamada es para avisarle que la señorita Muller me pidió que le avisara que Amy Burrell se encuentra en la fundación debido a que ella se encuentra en el hospital— informó Mayerli con el tono más monótono que pudo atribuir a la llamada.

— ¿Está en el hospital? — pregunté alarmado.

—Así es señor Burrell— afirmó Mayerli.

¡Amy se encuentra en el hospital y yo aquí firmando papeles!

— ¿En qué hospital se encuentra? — pregunté nervioso.

—Según mi información se encuentra en el hospital Santa Juana Roosevelt— informó Mayerli con ese tono de voz monótono y moribundo.

Escuchar su forma tan escasa de sentimientos me hace preguntar ¿Qué habrá sucedido para utilizar ese tono de voz tan horrible?

—Gracias por la información— colgué la llamada.

Tomé las cosas que creía importante y un anillo de dulce en mi bolsillo, los dulces son complementos elementales en la vida de una persona, lo había aprendido a partir del estilo de vida de Amy Muller.

— ¿Que sucedió Nicolás? — pregunto Sam extrañado de mi cambio de comportamiento.

—Debo de irme, Amy está en el hospital— explique.

Salí corriendo de la oficina hasta que recordé la presencia de Sam en la oficina, regresé con la misma velocidad y abrí la puerta de madera.

—Termina el papeleo—