No estoy dispuesto a perderte una vez más. -James Maslow.

Capitulo 35

Taquicardia. 

Pulsaciones aceleradas del ritmo cardíaco. En la vida cotidiana sufrimos taquicardia cuando tenemos emociones fuertes, tales como el enojo, el miedo y el estrés. O simplemente porque tenemos algunos vicios o por anomalías. Normalmente hay casos en que las personas no sienten ni se dan cuenta que sufren por momentos taquicardia, pero hay otros casos que sucede lo contrario. 

Mi caso.

Mi pecho se comprime y se me va la respiración. ¿Como una persona puede provocar esto?

James al parecer no nota que los latidos de mi corazón bombean más rápido, no nota que esta provocando muchas cosas en mi sistema. Y no escucha lo que mi corazón quiere, porque este  anhela ser escuchado. Sin embargo mi razón no lo deja. 

Y yo odio que estos dos no se coordinen. 

Odio que sean enemigos en una situación tan complicada, en una situación que terriblemente ambos me deben de ayudar. 

- ¿Que haces aquí? -pregunto, después de minutos de silencio. Mi voz es suave y sorprendida.

- Traigo algo para ti. -se inclina hacia el lado que no alcanzo a ver y toma un ramo de girasoles. Un ramo como el primero que recibí.- Quise traer el ultimo personalmente. -me tiende el ramo, esperando que lo tome. Sin dudar mucho lo tomo y sin poder evitarlo nuestros dedos rozan en una suave caricia, y a pesar de que es suave, envía escalofríos por todo mi cuerpo.- Nos vemos princesa.-se inclina y es tan rápido que apenas siento sus labios chocar con mi helada mejilla. 

Sonríe tímidamente y se va.

Inconscientemente mi mano va directamente a mi mejilla.

Por que la sensación de sentir los labios suaves de James sobre mi piel es reconfortante. Es una sensación genuina y llena de ternura. Es como si lo nuestro jamas hubiese terminado. 

- ¿Que rayos? -pregunto al pasar mi mano por mi frente.- Estoy sudando, Tn_ te debiste de haber visto tan patética. 

Entro a la casa con el ramo de girasoles en brazos, lo dejo sobre la mesa y lo observo fijamente antes de tomar la tarjeta entre mis dedos y comenzar a leerla.  

Quiero ser cursi solo contigo, quiero cantar en tu oído tu canción favorita, quiero ser tu colchón las veces que nos quedemos dormidos, quiero cargarte mientras nadamos para evitar cansarte, quiero tener esa hermosa oportunidad de ser tu todo. 

Más...

Ahora junta todas las tarjetas desde la primera hasta esta ultima. Luchare hasta conseguirlo, te quiero y lo hago de verdad. 

James. (Tu futuro novio) 

Mi respiración se acelera mientras voy hasta el cajón y saco todas las tarjetas. Me siento en el piso dejando estas sobre la mesa, las voy dejando como si de un rompecabezas se tratase y al final. Mi cuerpo se estremece ante la oración que componen todas. 

No estoy dispuesto a perderte una vez más...  

Un suspiro escapa de mis labios junto a una sonrisa. Sin tomar en cuenta que también lagrimas resbalan por mis ojos. No quiero llorar, pero soy muy sentimental. Yo también lo quiero y ahora que he analizado mejor las cosas se que no todo es su culpa, también es de personas externas. Pero también es mi culpa, por haber sido una persona inmadura y por haberme cerrado a escuchar sus argumentos. 

Lo quiero a mi lado, pero también tengo miedo.

Tengo miedo a sentir más que él.

Miedo a que él sea mi todo, y yo no lo sea para él.

Miedo a que deje de quererme después de estar juntos un tiempo. 

Miedo a que se de cuenta que yo no soy lo que el espera.

Pero más miedo a que me haga lo mismo que antes.

No quiero darle todo mi amor y que no sea reciproco. Valgo mucho, tanto que no debo ser ni un juguete para ni un hombre. 

Eso deben de saber todas las mujeres, un hombre no puede usarte como su juguete en ningún caso, ni para dar celos, ni para usarte mientras tiene a otra. No somos juguetes, ni monedas de cambio. Tenemos valores, principios y somos lo más bello que ha creado el hombre. Pues, nuestros dolores, sacrificios y luchas nos llevan a ser fuertes. Tenemos derecho a decir no, y seguir con nuestra vida. 

El timbre suena y mi realidad me golpea. Seco las lagrimas que resbalan por mi rostro de manera no tan suave y me levanto hasta abrir.

- Kendall.-apenas hablo en susurro.

- Tn_, yo...¿Puedo pasar?

Por un momento no se que decir.

- Adelante.-me hago aun lado, antes de cerrar la puerta y seguirlo hasta la sala.

- Veo que es cierto lo que me dijo James.-gira observando mis expresiones.- En verdad te quiere, y esos ramos son la prueba de ellos. ¿Te puedo decir algo? -aun sin querer hablar, asiento.- Él nunca a sido demasiado detallista, es muy cariñoso o al menos lo intenta pero no insiste, si alguien no quiere estar con él, no insiste. En verdad esta enamorado de ti, tu le haces bien a él.

- No se porque me dices todo esto, si crees que seré yo la que cambie a James te equivocas. No quiero ni pensar que soy yo la que esta influyendo en él, más que hacerme sentir mejor me hace sentir peor, eso me confunde y no quiero estar confundida. 

>>Yo amo mi libertad, cuando estaba en New York todo era más fácil allá no pensaba en líos amorosos y no pensaba en gustarle a alguien. Todo estaba bien, pasaba desapercibida en la ciudad. Extraño eso. 

- Lo siento, no quería hacerte sentirte así, sin embargo quiero aclarar ese punto, él es mi amigo.

Una risa irónica brota de mis labios.

- Yo también lo era.-mis ambas manos pasan por mi cabello llevándolo hacia atrás, en un acto de desesperación.

- Lo eres, yo no e dicho lo contrario. Pero a él lo conozco desde hace tiempo y a ti a

- Vaya, no sabia que el tiempo lo define todo. Yo tengo amigos que conozco desde hace mucho tiempo y no los pongo sobre ti. 

- Tn_, esto es diferente. 

- Tienes razón, ¿Por que estas aquí? -pregunto.

- Quiero arreglar las cosas contigo.

- Bien.

- Bien...-responde.

- Ok.

- Okay...-continua.

- Bueno.

- Bien.

Nos miramos unos minutos más antes de que él prácticamente corriera y me tomara entre sus largos brazos. Abrazo que fue correspondido.

Lo extrañaba demasiado. 

- Realmente me estaba preguntando cuanto duraríamos así.-pregunto mientras mi cabeza se acostumbra más a su pecho.

- Cuando me abriste la puerta quería abrazarte.

- Te extrañe mucho.

- Yo igual lastimada. 

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Un capitulo más. Espero y les guste, díganme que piensan en los comentarios. Los quiero mucho ;*