Capitulo 31

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Mi corazón estaba agitado. 

Mi mente estaba en blanco y mi cuerpo temblaba.

Las palabras de James aun taladraban en mi mente. 

Se que a muchas les suele pasar que por no hacer quedar mal a un chico o chica según sea el caso, y evitar una posible burla hacia dicha persona, aceptan. Y otras no les importa esto y son sinceras. Porque de eso se trata, o haces quedar bien al otro o tu quedas como la villana del cuento. Aquí tristemente solo tu quedas mal; una por aceptar y tratar de evitar que el o ella quede mal ante todos pero internamente no te sientes bien por mentir o no ser sincera o por ser sincera y rechazar.

Aquí entra el dilema, eres sincera o sincero teniendo como consecuencia el desprecio, o los haces felices pero tu te mientes. La pregunta es ¿La persona que espera respuesta queda mal en algún momento? En una situación así no, porque si la persona que da la respuesta dice si queda como el héroe, pero si dice no, queda como el pobre chico o chica no merece a una persona así.

Pero no queremos clase de moral, todos se preguntaran por lo que hice.

Corrí. 

Si, merezco su odio. 

Soy una cobarde.

No quería mentir pero tampoco quería romper el corazón de los espectadores. Cuando comencé a correr las personas exclamaron un famoso ¡oh! decepcionante.

Como si no fuera decepcionante que ellos crean que solo trayéndome serenata me van a convencer. Con cosas lindas no se solucionan las cosas. Aunque por una parte estoy feliz que al fin Kendall y James hayan arreglado sus cosas por otra parte estoy decepcionada de Kendo, me vio llorar por James, me escucho maldecir cientos de veces y me acompaño con el rencor que sentía y hoy ayuda a James para reconquistarme.

Las heridas no sanan en semanas, aun no estoy lista para una relación y mucho menos para regresar con él pero ellos sin duda no lo entienden.

Toc, toc.

Se escucha en el fondo, Kendall. Sin embargo me acuesto, apago las luces y me coloco una almohada sobre la oreja. 

- ¡Tn_! 

Escucho como gritan de fondo, sin embargo no deseo levantarme.

- ¡Tn_! -nuevamente esa irritante voz.

- ¡Tn_! 

¡Agh! Me levanto con pereza hasta llegar a la puerta. El sueño desaparece al ver de quien se trata.

- ¿Por que hiciste eso anoche? -pregunta.

- ¿Quien te dejo pasar? 

- Te hice una pregunta.

- Pues yo te hice otra.-contraataco.

- Tu papá.

- En primera no tienes que reclamarme nada, porque estas en mi casa. Y si hice lo que hice fue porque no estaba cómoda con la situación.

- A él le dolió el rechazo.

- Lo dices ¿en serio? -mi expresión fue sorpresa genuina.

- Si, tu no te quedaste a ver la escena, simplemente corriste. 

¡Auch!

- ¿Estas consciente de lo que estas diciendo?

- Si no lo estuviera, no te estaría diciendo esto.

- Estas consciente que él fue por quien llore días y no solo eso me lastimaron por él, incluso tuve que cambiarme de escuela y eso no lo ves.

-  Me explico lo que paso ¿por que no lo escuchas? -levanto las manos exclamando.

No estoy dispuesto a perderte una vez más. -James Maslow.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora