LA VIDA CAMBIA

7.1K 293 13
                                    

Hubo una época en la que era amargo, tozudo, antisocial y borde. Bueno... lo sigo siendo. Hace ya dos años desde que entré en el grupo de niños. Los Jóvenes Titanes, que ya no son tan niños. Todos desde lo sucedido con Trigon y Terra tomamos nuestro propio camino.

Kori y Dick se casaron el año pasado, y, para mi sorpresa, esperan un hijo. Nunca he visto a mi hermanastro como un padre. Siempre lo he visto infantil, irresponsable y despreocupado, pero la gente cambia. Pero tampoco lo he visto nunca tan feliz. Desde que establecieron matrimonio ya no los vemos mucho. Solo en la misiones graves o alguna tarde en la que se dignan a venir y charlar.

Garfield se pasa todos el día con Donna. Lo que me sorprendió mucho,  ya que era el claro reemplazo de Terra. No lo han dicho, pero probablemente están juntos.

Jaime también tuvo suerte en el tema de lo cursi y romántico. Encontró pareja civil. Aunque aún no nos ha dicho nada de este.

¿Y que hay de mí ? ¿Ha cambiado algo en mi vida? Bueno, puede que algo sí. Desde los sucedido con Terra, Rachel y yo no podemos estar sin el otro.

Y es ahora cuando yo me pongo cursi.

-¿Damian?

La voz a mis espaldas me hizo detenerme y tragar saliva. Una voz fría y dulce al mismo tiempo.

-¿Qué sucede, Raven?

-Nada - sacudió la cabeza y se acercó a mí impregnandome de olor lavanda - hace días que no profundizamos.

Realmente duduba sobre mis sentimientos y preferí apartarme de ella para pensar.

Su mano rozó mi hombro y me hizo girarme. Hace unos años tendría que haber levantado a los ojos. Pero el tiempo me pasó factura y me hizo a su altura. Por lo que podíamos sumergirnos en los ojos del otro sin ningún esfuerzo.

-¿Profundizar? - me humedeci los labios discreto y aparte la mirada sintiendo como el rubor me subía por el cuello.

Se separó lo considerable de mí y buscó mi mirada torpemente.

-Damian. Sé que me has estado evitando. Lo que quiero saber es el porqué.

Se plantó seria cruzada de brazos y me miro muy seria. Más seria de lo normal.

-Eso no es verdad. No te he estado evitando - mi voz me delataba. Con ella era imposible mentir. Sus ojos violetas clavados en mí dolían.

-Por favor... no me mientas... - se inclinó a mí y los ojos casi se me salieron de las órbitas cuando la ví por el rabillo del ojo abalanzarse hacia mí, rodeando mi cuello con sus brazos.

A los pocos segundos sucumbi a su abrazo, la rodee con mis brazos y enterré el rostro en su pelo. Absorbiendo el calor y frío de su cuerpo al mismo tiempo. Ese olor a lavanda tan conocido. Y las lágrimas se me escaparon por ninguna razón.

La sentí estremecerse.

-¿Damian?

-Rachel... lo-losiento...

Y ahí estaba yo. Rindiendome ante alguien. Un ex-asesino entrenado desde que nació. Cruel, despiadado, sin conciencia, sin amor por nadie... Rindiendome ante la persona que había capturado lo poco que quedaba de mí.

-No tienes que disculparte... - me susurró enterrandose más en mí.

-Estoy confuso... nada más...

-Damian Wayne sentimental, los años te han cambiado, chico pájaro...

Me reí aún entre lágrimas ante la verdad que dijo.

-A ambos nos han cambiado...

Sorbio con la nariz silenciosa y me dí cuenta de que su cara también estaba empapada.

-¿Qué rayos nos pasa...? - cerré los ojos  y me fundi en su hombro, en su pelo. En ella.

-¿El tiempo? ¿Sentimientos...?

-Es probable... -susurré amortiguado por ella.

Se separó de pronto. Me miró sin sonreir y se limpió las lágrimas que le surcaban las mejillas con los dedos. Definitivamente era lo más bello que había visto nunca.

Se acercó a mí mientras una lágrima corría por mi mejilla, la detuvo con una mano y posó la otra en la otra mejilla.

En ese momento todos mis pensamientos se derrumbaron. Ese momento en el que la chica que ahora duerme a mi derecha juntó sus labios con los míos. Ansiando al otro. Desde hace años ambos esperabamos esto. Pero ninguno tuvo el valor de confesarlo hasta esa lluviosa tarde de primavera en la que mi vida dió un vuelco.

Os avisé... Yo también puedo ponerme en plan cursi.






 PÁGINAS CORTAS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora