¿Quién recibió el mensaje? ©

El juego (parte 1)

¿Estaban bien? No sabía si describirlo de esa manera, estaban...simplemente estaban. Stiles no sabía muy bien cómo actuar y eso le ponía nervioso, pero tenía nervios extras ya que al juego no solo iban a ir él y Derek, sino que su padre le dijo que pasaría por ahí ya que terminaba su turno temprano.

-¿Por qué tiene que ir también?- se preguntó estando sentado en medio de la cama. Faltaban como cuarenta minutos para que Derek pasara por él y sin embargo no se había comenzado a preparar aun.

Respiró profundo y sintió el leve ardor en sus nalgas, lo que al segundo le hizo recordar en lo que había sucedido. ¿Le había gustado? Un poco. ¿Lo repetiría? No estaba seguro. Claro que no era agradable que a esa edad te golpeen como a un niño pequeño pero...fue excitante, estar completamente expuesto y a merced de Derek. Había dolido, eso sí pero quizás si Derek...quien sabe, regulaba un poco su fuerza, quizás podría disfrutarlo por completo.

La vibración de su teléfono sobre la mesita le hizo dejar de pensar y se estiró para tomarlo, se levantó a prisa al ver el mensaje de Lydia diciéndole que ya estaba afuera. Corrió escaleras abajo con un poco de molestia y abrió la puerta dejando entrar a la pelirroja.

-Ya era hora- soltó ella entrando con su bolso colgándole de un brazo -¿Por qué diablos aun no estás listo?-

-Estaba pensando- contestó y ella levantó una ceja –No te lo dije pero Derek estuvo aquí y...-

-No, no me lo dijiste- le interrumpió

-Él irá al partido también y...-

-Bien, ve a ducharte y nos vamos todos en mi auto- le ordenó y Stiles rodó los ojos sin poder replicar. ¡Quería hacerlo! Pero no pudo, primero porque a Lydia nunca puedes cambiarle los planes, y segundo porque estaba realmente atrasado y debía ducharse ya o no estaría listo a tiempo.

Se dio una ducha un tanto rápida, evitó frotarse muy fuerte el trasero y luego salió a su cuarto a vestirse, Lydia estaba utilizando su computadora distraídamente mientras él buscaba ropa.

-¿Azul o negro?- preguntó él

-¿Bóxer o remera?- preguntó ella sin mirarle

-Bóxer-

-Negro- dijo al instante y Stiles se colocó el negro y luego se puso unos pantalones marrones y miró dos remeras en la cama –La azul- dijo ella y Stiles agarró la azul un poco oscuro.

Se miró al espejo arreglándose el cabello aun húmedo con los dedos y luego se colocó un poco de colonia y volteó encontrando a su amiga con una sonrisa pícara.

-¿Qué sucede?- preguntó y ella señaló a la computadora -¡¿Qué diablos Lydia?!- gritó espantado al ver la imagen de un chico completamente atado y amordazado y a otro con un látigo y completamente desnudo enfrente.

Stiles casi corrió hasta el escritorio y apagó la máquina avergonzado.

-¿Por qué buscas algo así?- le preguntó y ella sonrió divertida

-No lo sé, solo me dio curiosidad todo el tema de d/s- contestó encogiéndose de hombros –De todos modos... ¿listo?- preguntó poniéndose de pie y Stiles asintió –Bien, vámonos- le indicó y tomó su bolso saliendo del cuarto.

Sin embargo Stiles no pudo eliminar la imagen de su cabeza y tuvo que salir a su encuentro con Derek pensando en eso.

El ojiverde le recorrió con la mirada descaradamente y Stiles solo pudo agachar la cabeza con vergüenza. ¿No podía disimular un poco?

-Te ves bien Stiles- alagó en un susurro mientras se detenía a dos pasos de él. Stiles apretó los labios y tragó levemente

-Tú también Derek- contestó y su respiración se dificultó un poco –Lydia... ¿te molesta si vamos con ella?- murmuró y Derek levantó una ceja –Lo siento Señor, pero ella...-