Alianza y conexión

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Baek Ye Bin, una hermosa chica de 19 años, rubia bastante solitaria que solo se dedicaba a cultivar melones en su pequeño huerto, no iba al instituto y tampoco trabajaba en algún establecimiento, según sus padres, solía subir mucho colina arriba para vender sus frutos a un hombre al que le encantaban, con El Paso del tiempo la chica enfermó de anemia, se encontraba bastante decaída y finalmente un día, la encontraron en su habitación con las muñecas cortadas, sus padres también decían que constantemente la picaban "insectos". Lee Mijoo, una chica de 16 años de primer grado que cayó accidentalmente de las escaleras de su casa, anemia y actitud distante durante sus últimos días, su hermano mayor la encontró, las mismas marcas. Park JiSung, 15 años, estudiante de último grado de secundaria, intoxicación con un medicamento, mismas características. Amy Lee, 28 años, desaparecida, mismas características antes de. Krystal Jung 23 años, accidente automovilístico, mismas características. Etc, etc, etc.

Asqueado, así era como me sentía, me había tomado tiempo reunir información, me había costado trabajo hablar con familiares y conseguir fotografías de las víctimas, pero por fin, finalmente podía corroborar que efectivamente, el lapso en el que mi objeto de análisis necesitaba salir a cazar era de tres meses y medio a cuatro.
Últimamente no dormía mucho, necesitaba el libro que Woohyun me había dicho, en el venía lo que necesitaba para dejar expuesto al profesor Kim Myungsoo, por ahora, me bastaba con desprestigiarlo un poco por haber dejado tan repentinamente su puesto en la escuela y por estar saliendo con Sungyeol. Tenia de mi lado al novio de Ailee, Jang Dongwoo, a la hermana mayor de Krystal, Jessica, a mi ahora buena amiga Taeyeon, quien me ayudaba a aclarar algunas cosas y por supuesto a la hermana de Woohyun, Haneul.

Me había costado trabajo convencerlos a todos, pero después de mostrarles mis teorías y las similitudes entre varios casos haciendo buen uso de mi lenguaje y mi capacidad de argumentar para persuadir a los demás, logré hacerme de estos pocos aunque valiosos aliados, mi plan seguía en marcha, necesitaba conseguir ese libro, buscar lo que me hacía falta y ¿por qué no?, lograr que el resto de la comunidad en este recóndito lugar linchara al asqueroso monstruo que estaba alimentándose de nuestros residentes.

El aire frío entraba por la ventana, los libros sobre mi mesa hojeaban a causa de este, mis ojos se mantenían fijos en el techo conforme suspiraba. Extrañaba a Woohyun, lo extrañaba con todo mi ser, él había sido mi amigo desde hacía años, y aunque ante los ojos del resto de las personas siempre fue solo mi amigo, él y yo siempre nos mantuvimos unidos, demostrándonos en secreto el amor infinito que sentíamos el uno por el otro, imaginando cómo sería una vida en la que ambos pudiésemos salir a la calle tomados de la mano, dándonos un beso en el parque, abrazándonos bajo las luces de la acera, sin importar quién estuviera cerca, había tantos sueños por seguir, tantas metas por cumplir, y ahora, el compañero de vida con el que me iría de este viejo y mugriento sitio, ya no estaba más, ¿quien tiraría piedras por mi ventana en las noches solo para mirarme?, ¿quien me hablaría de tantas cosas extrañas y sobrenaturales con esa pasión?, ¿a quien amaría ahora?
Un suave toc toc resonó en mi ventana, haciéndome levantar de golpe esperanzado.

-¡Woohyun!

-Lamento decepcionarte.

Murmuró un muchacho de cabellos rojos extravagantes que yacía sentado en el marco de la ventana, mirándome fijamente conforme lamía sus labios de forma provocativa.

-Este sitio, tiene un ligero aroma impregnado parecido al del tipo de piernas largas.

-Sungyeol.

Murmuré suavemente al escucharle, ¿quien era él y que hacía ahí?, un escalofrío recorrió mi espina dorsal y una idea loca cruzó por mi cabeza. Extendí la mano hasta mi buró rápidamente y tomé el pequeño espejo que usaba para mirar si tenía granos en el rostro, dándole la espalda al chico al tiempo que colocaba el espejo frente a mí apuntando a la ventana, nada. Su risa me estremeció totalmente, haciéndome dejar caer el objeto en el suelo de un salto mientras me incorporaba hasta un extremo de la habitación severamente asustado.

Neblina. (Myungyeol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora