Neblina. (Myungyeol)

Embriagante Hombre.

El funeral había transcurrido fúnebre y lóbrego, las hojas de los árboles caían secas sobre nosotros, las personas uniformadas en color negro abarrotaban el lugar, todos conocían a mi padre, después de todo era el jefe de la policía, mi madre lloraba desconsolada, se negaba a dejar ir a mi padre, aquello de cierta forma me rompía el corazón más de lo que ya sentía tenerlo destrozado, pero no podía hacer nada, ella no escuchaba, no entendía de razones, lo único que entendía era el dolor que la pérdida de su esposo le causaba.

Una vez todo hubo terminado, yo me dirigí al bosque, sintiendo las gotas de lluvia poco a poco caer sobre mí, caminé, caminé y caminé hasta llegar a un claro, me senté ahí y miré al cielo, suspiré y dejé salir mis lágrimas una vez más, lloré por mi padre hasta perder la conciencia.

•~•

Abrí los ojos, mi ropa se encontraba seca, estaba en mi habitación, aunque yo no recordaba para nada haber ido a casa.

-¿Que hago aquí?

Murmuré mientras me incorporaba, escuchando unos suaves murmullos provenir de la planta baja, por lo que me incorporé y a paso lento bajé las escaleras hasta llegar a la cocina, donde pude observar a mi madre con sus ojos enrojecidos y una copa de vino en una mano, la botella yacía a la mitad sobre la mesa y Kim Myungsoo se encontraba Justo a su lado.

-Señora Lee, entiendo totalmente esto, sin embargo es algo que no podemos evitar, la muerte está en nuestra naturaleza.

-¡Myungsoo!

Grité al escucharle decir aquello, caminé decidido hasta la mesa y tomé la botella.

-Hola Yeol.

-Sungyeol, es Sungyeol.

-Hijo que bueno que despiertas, este hombre te encontró muerto de frío en el bosque y te trajo a casa, ha sido muy gentil.

Murmuró suavemente con su voz temblorosa.

-También veo que ha sido gentil al darte alcohol.

Myungsoo solo atinó a reír con levedad y negar, cruzando sus brazos y su pierna mientras me observaba divertido.

-¿Que te hace creer que fue él?

-Tú no bebes, madre y no hay alcohol en casa.

-A tu Padre le gustaba el vino.

Dijo con la vista baja mientras sostenía su copa con intención de darle otro sorbo.

-¡Papá está muerto!

-¡Basta Sungyeol!

Gritó entre lágrimas antes de llevarse las manos a la cabeza y sollozar, Myungsoo rápidamente la abrazó y me observó con exasperación, negando mientras la ayudaba a ponerse de pie.

-Señora Lee la llevó a su cama.

Ella asintió, y yo, solo pude observar como Myungsoo llevaba a mi madre al piso de arriba mientras yo, esperaba en el comedor, bebiendo de la botella como si el vino pudiese limpiar la pesadumbre en mi interior, como si aquello fuese la solución a todo, a los minutos pude escuchar como Myungsoo bajaba por las escaleras, yendo directo hacia mí, parándose Justo enfrente mío.

-¿Que?

-No estuvo bien Yeol, tú madre está dolida, aunque sea esta ocasión, déjala beber tranquila.

-Yo también lo estoy.

-Entiende, ella perdió al amor de su vida, a su compañero, al hombre que le ayudó a construir su familia, debes entenderla y apoyarla, no retarla por cómo sobrelleva su dolor, cada quien tiene su propio duelo, es una mujer mayor.