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Mucho viento

Llegamos al gas station exactamente en una hora. Tenía ganas de ir al baño. Todo el grupo bajó al gas station, yo fui directo a hacer cola.

Cogí mi teléfono para ver que hacían mis amigas en las redes sociales. Hasta que llegó mi turno.

Después entré con mi papa a ver qué cosas podríais comprar. Cogimos botellas de agua, yo una barra de chocolate que nunca había visto y mi papá unas papitas lays.

Saliendo de la tienda mi hombro roza una espalda, el dueño de la espalda voltea y lo veo. Sus ojos castaños me miraron. Sonrío y me voy.

-Mamá, te traje una botella de agua y esta barra de granola- Ella sonríe.

-A ti te traje gomitas de gusano- le di a Derek.

-Y a ti nada- termino con Ivan. Él hace una cara de tristeza,  pero al final le digo que papá tiene sus caramelos.

Llegamos 1 hora después al puerto. Caminos al bote que nos llevaría y en la cola aprovechan para tomarnos fotos familiares. Yo no paraba de intercambiar miradas con el castaño y con el otro chico del bus. Estarían en mi grupo todo el día, eso quiere decir que estaremos en el mismo bote, misma zona de sillas en la playa, mismo catamaran.

Leo nos pone unas cintas en las muñecas, dice que es para no perdernos y saber quien es del grupo y quien no.

Al subir al bote me pongo en la zona donde debería estar la ventana. Tengo el mar a mi costado y puedo ver todo. Pronto, el bote comienza a acelerar y el aire comienza a caerme directo en la cara, agua salada me salpicaba y me impedía respirar. Le cambié de posición a Ivan, él si estaba normal.

El aire me hace cerrar los ojos, me siento cansada. Me limito a pensar en todo, cómo ha sido mi viaje hasta ahora, qué haré cuando llegue a casa.

El bote para, Leo dice que llegamos a la piscina natural. Las personas del bote comienzan a quitarse la ropa, viéndolos a todo con sus ropa a baño yo también lo hago. Me pongo bloqueador y ya estoy lista para meterme al agua.