«51»

2.4K 475 67
                                    

Perdón perdón perdón. No hay forma de compensar el abandono hacia mis hijos pero sí puedo asegurar que volveré a estar activa en Wattpad y cuidaré mejor de ellos. Voy a enfocarme especialmente en esta historia ya que no le queda mucho y quiero que siga un buen camino. Muchas gracias a lxs que siguen aquí pese a mi cósmica falta de responsabilidad. ❤

No ser recibido por Dean fue un golpe duro para él, pero ¿desayunar solo? Eso fue devastador. No había día en que ellos desayunaran sin el otro, a partir de eso Castiel pudo imaginar lo enojado que Dean estaba.

¿Y cómo no estarlo? Espero que Benny le diga pronto.

Aunque mantuvo su mente ocupada ayudando a Mary con su jardín, seguía nublado por la angustia de ser ignorado por Dean. Su día pareció empeorar cuando le tocó regar las flores y, entre ellas, varias Dalias Rosadas. Su incomodidad no pasó desapercibida por Mary, después de todo, incluso ella sabía que el distante comportamiento de su hijo esa mañana debía ser por Castiel. Ella se acercó y apretó su hombro de forma reconfortante.

—Deberías intentar hablar con él.

Castiel sonrió débilmente. No iba a esforzarse por hacerse el desentendido con ella.

—Él no quiere verme, señora Winchester.

Mary resopló con gracia, reteniendo una sonrisa muerta en sus labios.

—¿No lo entiendes? Él siempre quiere verte. Dean solo está dolido y tú puedes arreglarlo, pero no lo harás si te quedas aquí sin hacer nada.

Eso era... obvio, pero revelador al mismo tiempo. Dean siempre quiere verte. Castiel se sentía de la misma forma, y si ambos compartían ese mismo aterrador y maravilloso sentimiento... Entonces era hora de arreglar las cosas.

Castiel no puso su plan en marcha sin antes abrazar a Mary por haberle dado el aliento que tanto le faltaba. Se desplazó rápidamente hacia el interior de la casa y de la misma forma hasta la segunda planta. Su puerta permanecía cerrada, pero eso no iba a detenerlo. Se adentró sin molestarse en tocar, y la escena que lo recibió le partió el corazón en mil pedazos. Sentado en su cama, con el teléfono en sus manos y luciendo una mirada devastadora. Dean no estaba bien.

—Cas, Benny va a mudarse...

No había forma de reconfortar a Dean del todo, pero no planeaba abandonarlo tampoco. Castiel tomó asiento junto a él en silencio.

—Lo siento.

—¿Tú lo sabías?

—Sí, pero no debía ser yo quien te lo dijera.

—¿Entonces tú y él no están...?

Los ojos de Castiel se abrieron como platos.

—¿Juntos? Dean, apenas sí puedo creer que estoy en algo así como una relación. ¿En serio me crees capaz de algo así?

Dean se sintió aún más patético de lo que se había sentido durante esa tarde, incluso sabiendo que ni Castiel ni Benny habían sido los culpables de ello, sino...

—No, pero puedo no ser suficiente para ti. Alastair lo hizo.

—Alastair era un assbutt.

Castiel acunó las manos de Dean entre las suyas, y por más pequeño que ese gesto fuera, logró reconfortar al rubio. No quería hacer otra cosa que no fuese estar a su lado y mantener a todos los males alejados de él.

—Dean, sé que no puedo deshacerme de tus inseguridades, pero ellas tampoco pueden deshacerse de mí.

Una pequeña sonrisa se asomó en los labios de Dean. Castiel se sintió levemente aliviado por ello.

—Muchas veces pienso en que no te merezco, pero tú también piensas que no me mereces. Es por eso que debemos permanecer juntos.

—¿Para hablar sobre nuestras guerras internas y llorar juntos por nuestra miserable autoestima?

—No, tonto, para ser mejores por el otro.

Dean asintió con gesto pensativo, ya no tan desanimado como hacía unos pocos minutos atrás.

—Estuve cerca.

—Por supuesto que no.

—Cas, rompes mi corazón.

—Entonces estamos a mano. Tú rompiste el mío esta mañana al no desayunar conmigo.

Touché.

Ambos se sentían aliviados por estar bien con el otro, pero eso no significaba que los problemas habían acabado ahí. La noticia de su mejor amigo volvió a golpear a Dean como un cubo de agua fría.

—Iré a ayudar a Benny a empacar sus cosas mañana. ¿Quieres venir?

—Preferiría dejarlos para que tengan su momento de mejores amigos.

—Sí, quizá sea lo mejor.

No lo era, ni de cerca, pero no podía insistir. Sabía que podía desmonorarse fácilmente con tan solo escuchar a Benny decir que todo iría bien, luciendo una sonrisa triste en todo momento. Tener a Castiel a su lado le daba fuerzas, pero esta era su despedida.

Alejarse de Benny no era algo que debía pasar pronto. No era algo que fuese a disfrutar, pero sabía de primera mano que debía hallar la forma de continuar su vida sin la gente perdida.

Fue en verano cuando Dean volvió a perder a alguien que quería.

It was on summer ❴DESTIEL❵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora