It was on summer ❴DESTIEL❵

«53»

Jamás había tenido tanto miedo de ver a Dean, pero aún así tuvo la valentía de aparecer en su casa temprano por la mañana. Ellos no habían discutido, pero las cosas habían terminado terriblemente mal y no era algo que pudiera resolverse con un ramo de flores o un pie de manzana. Dean debía estar odiándolo en ese momento.

Sus nudillos se pusieron en contacto con la puerta. Castiel temía más que nunca y ahora más que nunca deseaba que fuera Mary quien lo recibiera, pero la puerta se abrió y no era ella quien le sonreía desde adentro.

—Castiel.

Solo bastó con verlo para que las palabras se atoraran en su garganta.

—D-Dean.

—Supongo que vienes a ver a mamá, te está esperando en el jardín. ¿Quieres algo de beber antes de ir?

—No tengo sed, pero gracias.

Dean no parecía enojado, más bien actuaba como si nada hubiese pasado la noche anterior, lo cual era aún peor. Castiel sabía que Dean y su orgullo eran un equipo inalcanzable, pero aquello era su culpa y no podía dejarlo pasar.

—Dean, ¿podemos hablar?

—¿Sobre qué?

—Sobre lo de anoche.

Dean sonrió como si estuviese hablando con un pequeño niño ingenuo.

—No hay nada de que hablar. Tú lo dijiste, nosotros solo somos amigos.

—Sabes que no lo dije en serio. Escucha, mi padre...

—No te ofendas, Cas, pero ahora mismo no me interesa oírlo. Lucifer me acaba de decir que Benny se quedará por unos cuantos días más y queremos celebrarlo.

Castiel asintió mirando el suelo, más dolido que convencido. Hablar con Dean en ese momento era como hablar con un frío muro de concreto y no volvería a esforzarse hasta más tarde, cuando Dean estuviera de vuelta.

—¡Mamá, ya me voy a la fiesta!

Y mirando fijamente a Castiel, añadió:

—¡Quizá no vuelva hoy, así que no te preocupes por mí!

Y con una frívola sonrisa luciéndose en sus labios, salió de la casa sintiéndose aún peor que antes.

Porque pisotear el corazón de Castiel no sanaba el dolor del suyo.

Fue en verano cuando Dean y Castiel se hirieron mutuamente.