Ryba

Ryba 34

Los primeros días luego de aquel acontecimiento estaba con los nervios de punta, pero nada mas ocurrió.

Diez años habían transcurrido desde la primera vez que se habían visto, la primera y la única, luego de eso, pocos días luego la familia de ella se fue muy lejos y jamás la volvimos a ver.

Abuela: Hombre alegra la cara hoy es el cumpleaños número 14 de Azu, es un gran evento

Rob: Si tienes razón

Abuela: Han pasado muchos años y hemos tenido una vida tranquila, deja de preocuparte por eso

Rob: Lo sé, pero cada cumpleaños ellos se hacen mas y mas adultos y el miedo es inevitable

Abuela: Ryba tenia 16 años la primera vez que vio a Ria, aunque la historia se volviese a repetir 

Rob: ... Si, tienes razón

Abuela: Azu mi niño, feliz cumpleaños

Azu: Muchas gracias abuela 

Rob: Estas creciendo tan rápido hijo, feliz cumpleaños

Azu: Gracias papá

Rob: Vamos al salon tu madre organizo una gran fiesta

Azu: Ella siempre exagera y ahora que sera madre de nuevo, creo que esta mas exagerada aun

Abuela: Ella solo esta feliz

Azu: ¡Madre!

Madre: Mi pequeño Azu, ven dale un abrazo a mamá

Azu: ... ¿Por que lloras?

Madre: Mi pequeño ya tiene 14 años parece como si hubiese sido ayer cuando te di a luz 

Azu: Madre no llores por eso, no es como que dejase de ser tu hijo

Madre: Lo sé

Rob: Azu, ven es hora de saludar a los invitados

Azu: Si Padre

Madre: ¿Que ocurre con Rob hoy?

Abuela: Él siempre se pone sensible y dramático en este día

Madre: ¿Es por lo de la maldición?

Abuela: ... Así que tu igual lo sabías

Madre: Lo descubrí poco a poco con el tiempo, Azu es idéntico a Ryba

Abuela: Si, pero a su vez son distintos, no olvides que Azu es tu hijo, de nadie mas

Madre: Lo sé, muchas gracias Madre

Abuela: Solo apoya a ese niño, que no le alcance el mismo destino que a su hermano

Ria: Papá, ¿ a donde vamos?

Papá: No seas curiosa ya pronto lo sabras 

Ria: Mamá no seas así dime donde vamos

Mamá: Lo siento hija, yo tampoco lo sé

Ria: Esto no es justo hoy es mi cumpleaños, quiero saber donde vamos

Papá: Pronto llegaremos a mitad del camino, paciencia

Ria: Un segundo... este camino

Mamá: No me mires asi

Ria: Es el camino para ir a la isla de la sirena

Papá: Ria no te pares en el coche

Ria: ¡¿Vamos ahí verdad?!

Papá: Que te sientes Ria

Ria: Si hacia alla vamos, siempre quise ir a esa isla, dicen que las sirenas habitan esa parte del mar solo unos kilómetros mar adentro de la isla

Mamá: Ya tienes 14 años y aún crees en esos cuentos

Ria: Te lo dije mamá, fui salvada cuando niña de morir ahogada por una sirena azul.