LOVE ❤️ REBEL

Epílogo

*ROBERTA*

"Amor vs Odio"... ¿Qué significa esa palabra?.

Significa que cuándo amamos demasiado a una persona y ese ser amado te lastima, te engaña y te utiliza a su antojo. Tarde o temprano ese gran sentimiento deja de existir, olvidando así el gran amor, convirtiendose en asco, enojo, rencor, y por supuesto "odio".

También está el otro lado de la moneda, "Odio vs Amor"... significa que odiamos tanto a una persona, que al final ese supuesto odio se transforma en lo más mágico y hermoso que hay en ésta vida, "el amor", logrando así dar color y vida a sentimientos negativos u obscuros.

Un largo razonamiento que me lleva a pensar en "Mía", esa chica hueca, estúpida, odiosa, que tanto detestaba. Recuerdo que odiaba su manera de hablar, su forma de caminar, y por supuesto esa manera tan fresa de vestir.

No había absolutamente nada bueno, ni positivo que me hiciera pensar o incluso sentir diferente. Cada día tenía una razón nueva para pelar con ella, para agarrarme a golpes con Mía, no existía uno sólo de esos días en que mis insultos no revotaran en ella. 

Pero fue esa sonrisa acompañada de esos ojos, que una vez sin darme tiempo a razonar hicieron que me perdiera en su mirada azul, llenando por primera vez mis fosas nasales de su aroma. Creó que fue en ese instante en el que todo comenzó a cambiar, estaba apunto de decirle mil groserías pero cuándo quise darme cuenta ya Mía, se había volteado para irse, dejando todas esas palabras en mi boca.

Lo qué yo no sabía era que Mía, tenía sentimientos hacía mi, y no lo supe hasta tiempo después de que todo entre nosotras comenzó a suceder. Ella aguantó mi mal trató, palabras ofensivas, incluso dice que disfrutaba pelear conmigo para poder estar sólo un rato frente a mi. Un acto masoquista por su parte, pero al final solo el amor es capaz de aguantar todas esas cosas. 

Me enamoré, ella me atrapó y juntas tuvimos la mejor historia de amor durante varios años, o al menos eso fue hasta que tuve aquel accidente y perdí la memoria, me había convertido es esa Roberta que odiaba a Mía, pero que por dentro sabía que había algo más, cada vez que la veía.

Pero una vez recuperé la memoria, y la tuve en mis brazos de nuevo, juré que nunca más la volvería a tratar como a basura. 

Hoy hace diez años desde que nos casamos, ambas tenemos treinta y cinco años. Tenemos el matrimonio más fuerte y solido cómo roca, a basé de amor y de respeto. Entre nosotras nunca murió ese sentimiento que mueve al mundo, al contrario, se incrementó como nunca antes.

-¿Tía Roberta puedo pasar?- una sonrisa salió de mis labios al escuchar esa pequeña voz. Me giré y encontré a un apuesto hombrecito de tan sólo diez años.

-Hola, príncipe- sonreí y me agaché para recibirlo en mis brazos- No sabía que vendrías hoy pequeño.

-Papá, dice que hoy celebramos algo muy importante a parte de mi cumple años. 

-Sí- asiento y me incorporo- Mía y yo cumplimos hoy diez años de matrimonio, al igual que tú cumples diez años, enano.

-¡Doblé celebración!- gritó emocionado haciéndome reír.

-Sí, enano.

Leonardo, es el hijo o mejor dicho el único hijo que pudieron concebir Diego y Pilar. El día de mi boda con Mía, a Pilar le comenzaron los dolores y para cuándo era de noche se encontraba dando a luz al pequeño que quiero como si fuera mío.

Diego y su esposa, se convirtieron en grandes amigos nuestros, tanto así que hoy son parte de nuestra familia, son hermanos tanto para Mía, como para mi, por ello "Leo" nos llama "tías" a ambas, somos sus tías y nosotras lo amamos tal cuál lo fuera de sangre.