Por fin Sábado ha llegado, y Camila se encuentra arreglando su cama. El día anterior lo paso con sus dos nuevos amigos, Hector y Ernesto. Después de cenar con ellos la han llevado a casa y han quedado para desayunar juntos. Ella realmente está feliz de tener a alguien en Santa Cecilia, cada vez la sensación de sentirse sola desaparece más rápido. Se ha arreglado casual, con un vestido rojo y sencillo pero bonito. Ha quedado de ver a los muchachos en la entrada del mercado, se dirige a la salida de su casa cuando se encuentra con un muchacho parado frente a su puerta.
-Buenos días Camila
-Buenos días Hector, ¿Que haces aquí? ¿Y tan temprano?
-Yo solo me levante y ya no tenía sueño entonces decidí que podría pasar por ti antes.
-Qué amable de tu parte. -Agradeció la muchacha. -¿Y Ernesto?
-El bebió demasiado ayer así que probablemente no se levante hasta que le de hambre pero vamos, seguro nos alcanzará allá.
Entonces ambos amigos caminaron rumbo al mercado ahí tomarían un delicioso desayuno. Héctor llevo a su nueva amiga a la fonda "Margarita" era el lugar donde el y Ernesto acostumbraban comer, además de que todo lo que cocinaba Doña Margarita era delicioso y variado, tenia un sazón muy hogareño. Fue lo que pensó Camila al probar el primer bocado de las picaditas de pollo frente a ella, también probó el pozole de Héctor y no estaba nada mal. Después de desayunar ambos decidieron dar una vuelta por el jardín.
-Gracias por pagar el desayuno Héctor pero no tenías que hacerlo.
-No no claro que sí, tú nos diste de cenar ayer pero más que nada tómalo como una cortesía de amistad.
-¿De verdad... Tú... Me consideras tu amiga? -Pregunto Camila.
-Pues claro que si chamaca, se que nos acabamos de conocer, pero algo me dice que nos vamos a llevar muy bien. Además se que a Ernesto también le agradaste bastante.
Ambos caminaban ahora sin cruzar palabra. Camila estaba feliz por ahora ser considerada la amiga de alguien aquí y ella también quería eso, Héctor era un gran tipo y definitivamente quería tener una amistad con el. Todo estaba en orden hasta que Héctor para en seco, quedó mirándo fijamente frente a él, al percatarse Camila miro a la dirección que el hombre lo hacía encontrándose con una joven.
-Ah, ahí está. -Suspiró el joven.
-¿Quién es? -Pregunto curiosa Camila.
-La muchacha más linda del pueblo. Su nombre es Imelda.
Y ahí frente a él, una chica de piel canela, cabello negro y vestido morado se paseaba frente a ellos, caminaba rumbo a un puesto de fruta.
-¿Te gusta verdad?
-¿Que si me gusta? Me trae cacheteando la banqueta. -Contesto el muchacho seguido de un suspiro.
-¿Y por qué no le hablas?
-¿Que? ¿Hablarle yo? No no no no no, jamás podría, quiero decir ella jamás se fijaría en alguien como yo.
-No seas gallina Héctor. Dime ¿Alguna vez has hablado con ella?
-Pues le he deseado los buenos días.
Camila rodó los ojos.
-Eso no es hablar, tienes que saludarla e invitarla a pasear. Anda ¡Hazlo!
Héctor quedó inmóvil escuchando lo que a su parecer sería un completo suicidio.
-¡No! Cuando alguien se acerca a ella y no le parece, suele quitarse la bota y golpearlo.
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La Palomita de Santa Cecilia [Fanfic Coco]
FanfictionNadie lo sabe, pero antes de la película hubo otra historia que contar. Ven y descubre el comienzo de todo. Una historia alternativa, basada en la película ganadora al Oscar como "Mejor película animada" Coco.