En los ciclos sin fin de destrucción y comienzo de la humanidad, existieron personas diferentes con capacidades especiales, en algún momento los llamaron Alice, pero antes tenían otros nombres y otros orígenes, que fueron ocultos durante generacione...
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Al final me quede dormida entre todos los pensamientos que le quería transmitir a Ume sobre los últimos momentos de Ryunami, cuando abrí los ojos al día siguiente vi que me encontraba aun en la cama blanca donde me habían arrojado el día pasado, había cortinas blancas en 3 lados de las paredes y al intentar moverme note los grandes agujeros que perforaban mis dos muñecas, mis manos parecían inútiles por el dolor que me habían causado, incluso mi cuerpo estaba rígido, aun tenia lágrimas en los ojos, intente levantarme pero fue imposible mis músculos no se podían mover parecían congelados, empecé a entrar en pánico y mis ganas de gritar crecían. "Tranquila" escuche la voz de Ume, "Tranquilízate, es por lo que te inyectaron, intenta moverte poco a poco" repitió ella, parecía exhausta, así que yo seguí su consejo mientras me concentraba en mover mis manos y pies, cuando logre estar sentada en la cama me di cuenta que no era mi imaginación sentir que mi piel estaba congelada, ahora el líquido azul no solo se extendía en mis venas, los músculos y la piel tenían ese mismo tono, esto no era normal, "No parece un simple neutralizador" dijo Ume. Aunque yo nunca había visto un neutralizador me parecía que era demasiado extraño lo que le pasaba a mi cuerpo, incluso podría decir que brillaba un poco, al pensar esto me di cuenta que a través de las sabanas que separaban mi cama de las otras veía manchas azules parecidas a las mías, debían ser los demás agentes de la AAO.
No quería ver el mal estado de los demás y de todas formas no me podía mover, al menos no estaba sola si tenía el collar estaría bien, en ese momento dije en voz alta.
-Ume, si me quito el collar te debilitaras, pero si me lo quitan ellos te perderé para siempre.
"Quiero intentar algo, toca el collar" hice lo que me decía sin objetar, sentí un vacío en el estómago y vi como el collar desaparecía, si tocaba mi cuello aun podía sentirlo pero ya no era visible.
-¿Cómo? Pensé que con el neutralizador...
"El neutralizador corre por tus venas, no por las mías. Supongo que en algún momento también me afectara a mí, pues esa chica chica dijo que compartíamos heridas...revisa que más llevas contigo", dicho esto empecé a revisar mis bolsillos para saber qué cosas llevaba conmigo, tenía un gis obscuro que me había dado Tatsuma, una galleta salada que había robado del comedor, las cintas para el cabello que también me había dado Tatsuma y el dije de la letra "Y" de Ryunami. Con dedos temblorosos colgué el pequeño dije del collar de Ume, sin decir palabra el dije se hizo invisible. - Gracias, Ume. - Dije mientras mis ganas de llorar regresaban.
Estaba a punto de acostarme de nuevo en la cama cuando la cortina se corrió, Eiichi me miraba desde el otro lado, parecía haber hecho un gran esfuerzo para moverse. - ¿Con quién hablas Sakura? -Dijo el tirándose de nuevo en su cama pero dejando la cortina abierta, su cuerpo al igual que el mío tenía ese tono azul brillante que palpitaba.
