Souta un adolescente común, que vive solo con su hermana mayor, se vera en problemas luego de que este sin querer pidiera un deseo a unas estrellas fugaces, como consecuencia su hermana se ha convertido en una niña pequeña, a pesar de que esta aun r...
Colocando el seguro a la puerta de su casa y dando media vuelta en dirección a la calle cubiertas de nieve por la temporada invernal, el muchacho se ajusto la bufanda de color rojo que andaba trayendo atada al cuello y dio un leve suspiro.
-¡Sota!- El joven miro como una niña pequeña decía su nombre, mientras esta tomaba un poco de nieve entre sus manos formando así una bola de nieve.
Souta observó como esa pequeña niña sonreía, mientras tenía la intención de arrojar dicha munición blanca y helada.
-Dejalo, tenemos que irnos- comenzando a caminar de manera lenta, mientras dejaba un sendero de huella en la fría nieve, Souta sintió como su mano era tomada.
-¿No tienes frío? - Souta al sentir como los guantes que andaba trayendo la pequeña estaban un tanto húmedos por haber estado en contacto con la nieve, él solo decidido preguntarle a la misma Yun.
La niña negó con la cabeza y apretó aún más la mano de su hermano.
Ambos caminaron por unos minutos, en el frío invernal con los copos de nieves cayendo provocando que las pisadas que eran dejadas por el par de hermanos lentamente iban perdiéndose y siendo cubridas nuevamente por otra capa de nieve.
Yun desvío la mirada para ver a si el rostro del chico que le estaba tomando la mano con firmeza. El rostro del muchacho se veía totalmente perdido, no se podría decir que era en verdad lo que pasaba por la mente de este, pero solo pareciera como si se estuviera hundiendo en un profundo mar de pensamientos.
La pequeña niña que no podía entender que era lo que sucedía en verdad, y sólo es capaz de asemejar esa expresión con una de tristeza.
Ella solto la mano de Souta llamando así la atención de este, él observó como la niña se puso frente a él para evitar que este siguiera caminando.
-Sota--pronunciando el nombre del chico con un ligero error lingüístico, la niña tenía cierto rostro de seriedad e hizo una seña con su mano para que el chico se agachara para así quedar a la misma altura que ella.
Souta obedeciendo a la petición de la niña sin cuestionarse mucho, colocándose a la misma altura que la pequeña, Yun al ver eso se acerco a él colocando así sus manos sobre el rostro del muchacho.
Souta sólo se limitó a observar que era lo que estaba haciendo la pequeña niña, ella al tener sus manos sobre las mejillas de Souta, las estiró un poco para que pareciera que este estuviera haciendo una sonrisa.
Yun al hacer eso y ver tal mueca en el rostro del joven también sonrió.
Souta al ver lo que trataba de hacer su hermana, sonrió ligeramente y sus ojos se tornaron cristalinos, este tomó a la niña y al acerco a su cuerpo para así abrazarla.
La pequeña colocando un rostro de sorpresa por el repentino abrazo, iba a preguntar que sucedía pero al escuchar como el muchacho había comenzado a sollozar mientras la abrazaba fuertemente.
-Sota... duele.... - aun así, el chico no la soltó, mientras sus lágrimas aún seguían cayendo.
-Chifuyu, lo siento, lo siento, fui egoísta....- Souta sabia que era tarde para decir eso, es más la niña que estaba abrazando ahora no entendería la razón de sus palabras, lo que está haciendo él ahora no es más que otro acto egoísta para librarse ligeramente de la culpa que hay en su pecho.
La culpa de no haber visto mas allá de sus ojos y haber deseado algo egoísta solo por su "bienestar".
Yun dejó de forzar para que el chico la soltara, en cambio sólo guardo silencio ante los lamentos que estaba dando Souta.
-No... llores... - Quizás ella no sabe la razón, no hay manera de que ella entienda porque él muchacho haya "explotado" sus emociones por el acto que ella había hecho en tratar de animarlo, solo sabe que el escuchar llorar a Souta también le dolía, de un dolor que no sabia su procedencia.
Souta separo su cuerpo de esta dejándola así de abrazarla y observó como Yun también tenía los ojos llorosos.
-¿Por qué estás llorando tú también?- Souta sonrió levemente y miro como también en el rostro de la pequeña se deslizaba unas lágrimas a través de sus mejillas.
-No sé....duele.... - respondió Yun mientras sus ojos continuaban cristalinos.
Souta con las mangas de su abrigo se limpio los restos de lágrimas que corrían por sus mejillas y siguió con limpiar las de la infante frente a él.
-¿ Sota aún está trite? - ella que había dejado de llorar, miraba al chico frente a ella que ante su pregunta negó con la cabeza y sonrió.
- Gracias... Yun... ¿nos vamos? - Souta al terminar de decir eso, tomo a la niña para subirla hasta sus hombros.
El muchacho camino con su hermana a cuestas hasta llegar a una estación de ferrocarriles.
Yun al ver el lugar lleno de gente moviéndose de un lugar a otro con un gran reloj de farol en el centro de este además de los sonidos de los trenes que llegaban a la estación, sus ojos se iluminaron y golpeó la cabeza de Souta en señal de que este le bajara.
Souta al bajarla, vio como la infante se veía completamente emocionada por el cambio de escenario.
-Así que solo eras tímida....-Souta dijo eso para si mismo al ver como ella señalaba cosas y preguntaba que eran, recordó como esta casi no hablaba en los primeros días y ahora muestra una gran curiosidad que provoca que no dude en preguntar para saber que es.
Yendo a la boleteria para comprar unos tickets de viaje, Souta tomo la mano de la niña para que esta no se perdiera en el lugar en que estaban por la gente que había ahí.
-Sota ¿Donde vamo'?.
"A esta altura se te ocurre preguntar" - con ese pensamiento en mente, Souta recordó que aunque tuviera todo el mundo encima, sólo por este fin de semana, solo por este sábado y domingo, había algo que era más importante, en esta fecha y que lo había sido por los últimos cuatro años.
-Vamos a ver a papá y mamá.
Nota: Una ilustración que hice sobre lo que ocurre en este capitulo :)
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