CAPITULO 6

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Grité silenciosamente su nombre.

Quería que se detuviera a observar su alrededor, que notara mi presencia y que una sonrisa se apoderara de sus labios. Pero nada ocurrió. Continuó caminando e incluso, apresuró el paso cómo si deseara arrancarse de mí.

Y no le culpo.

Los recuerdos se dejan ir después de todo, ¿no?

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MinHo soltó un bostezo y con uno de sus dedos, secó la lágrima que brotó de su ojo derecho, si no salía de clase y trataba de despejar su mente, caería dormido en su asiento como muy comúnmente hacia Kyuhyun.

La clase terminó con el profesor de química pidiendo ayuda para encontrar unos papeles que cayeron de sus manos, mientras todos se levantaban de sus asientos y emprendían su camino hasta el comedor para tomar sus alimentos.

Minho no tenía intenciones de bajar al comedor como todos los días, él aún tenía un poco de vergüenza para ver a TaeMin a la cara, y mucho coraje acumulado cuando recordaba a DongHae y EunHyuk. Así que esperó un poco y salió del salón rumbo al tercer piso donde se encontraba la biblioteca.

Seguro de que muy pocos alumnos frecuentaban el lugar y que sería conveniente para tomar la merecida siesta que necesitaba. Recorrió las escaleras y abrió la puerta entrando como si solo él tuviera el permiso de hacerlo.

Se sentó en una de las sillas frente a una larga y ancha mesa en la que se supone, debían realizarse tareas y que nadie usaba. Se recargó y cerró los ojos para obtener un pequeño momento de paz, momento que se vio interrumpido vilmente por el ruido de algo pesado caer.

Abrió sus ojos cansado, planeando en su cabeza las cosas que podría inventar para hacer, a quien fuera que lo estaba interrumpiendo, escapar de ahí.

Observó la larga mesa en la que decidió sentarse al no ver nada fuera de lo normal, se puso de pie para avanzar a los libreros y atravesar los angostos pasillos que los libreros hacían formados unos al lado de otros.

Entonces sus ojos se abrieron cuando se encontró con algo que no esperaba. Ante sus ojos, la silueta de SooYoung entre un montón de libros se dibujó frente a él.

— SooYoung — El nombre se le escapó de los labios. MinHo supo que había llamado la atención de su vieja amiga y al momento en que sus ojos se conectaron, su garganta se secó y mil recuerdos lo atacaron.

— Minho — Las facciones en el rostro de SooYoung no se afectaron, ella permaneció igual, con esa leve sonrisa con la que leí a uno de los libros que la rodearon.

El silencio que envolvió el lugar, quemaba, Choi trataba de encontrar palabras adecuadas para largarse del lugar sin parecer grosero con ella, y ella simplemente miraba cautelosamente los movimientos y las facciones del alto.

— Creo que me tengo que ir — Minho relamió sus labios después de hablar, abrumado por todas las imágenes que taladraron su mente al verla.

— No es necesario Minho, no somos niños — Ella dejó de mirarlo y en cambio, posó sus ojos en las letras y graficas que las páginas de lo su libro mostraban.

Choi se rascó la nuca algo incómodo, pero atinó a sentarse junto a ella y recargar su espalda en el librero frente a ella. Contó hasta diez y trató de normalizar su pulso, odiaba verse dominado por los nervios.

E F I M E R O || 2min || FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora