ROSE (Harry Styles)

HELL

ROSALLIE

Salí del colegio como rayo, este había sido un día tan atareado; le conté a Álex todo lo que sucedió a detalle, James me preguntó cientos de veces como estaba, que si necesitaba ayuda legal el estaba para mí y me pidió explicaciones pero realmente solo mentí diciendo que fue todo un mal entendido y Dustin se disculpó miles de veces por decir que yo era si chica.

Al llegar a mi casa me quité mis zapatos y me metí a la cocina. Veía a mi padre pasar de un lado a otro con el celular en la oreja tratando de anotar diferentes cosas.

Me senté y comence a comer mi emparedado.

-Toma anota todo lo que oigas.- me dio la libreta y el celular y se empezó a conectar su laptop. Ya estoy tan acostumbrada a esto.

Terminé de anotar y me fui a mi habitación, saqué mis cuadernos y empecé con mi tarea pero de pronto mi celular empezó a sonar.

-¿Si?

-Rosallie va a llegar un taxi por ti en 15 minutos.

-¿Qué?

-El taxi llegará a tu casa y te llevará a la casa del bosque.

-¿Como pretendes que salga si mi padre está en casa?

-No lo sé, piensa en algo.- Colgó.

Intenté pensar en algo pero mi mente se quedó en blanco. Solo queda escabullirse.

Salí de mi cuarto con mucho cuidado de no hacer ruido, me fijé si mi padre seguía en la cocina para poder salir por la puerta de ahí pero el ya no estaba. Bien.

Oí un ruido en la sala y ahí estaba el con la laptop en las piernas escribiendo. Me agache y empecé a gatear pero a medio camino escuche  que se levantó. Mierda mierda mierda. Sentí como toda la sangre  abandonaba mi cuerpo y sentí sudor frío que después se desvaneció al ver que solo se levantó a estirar. Gatee rápido y salí por la puerta de la cocina.

Subí al taxi corriendo. Después de algo de tiempo comencé a reconocer el bosque hasta que llegamos al inicio del camino de rocas.

-¿Cuánto va a ser?.- Busque mi cartera dento de mi mochila pequeña.

-El señor Styles ya lo pago señorita.

-Oh muchas gracias.- Cerré mi mochila y me baje.

-Bonita noche.- yo también espero que sea bonita.

-Igualmente.- cerré la puerta.

Caminé hasta llegar a la casa. Di un gran respiro antes de abrir la puerta de la casa, me arme de valor y lo hice.

Caminé un poco y note un pequeño papel pegado al inicio de las escaleras.

Estoy en el cuarto vino ;)

Bien, está no será una noche tranquila.

Toque la puerta unas dos veces.

-Adelante.- De solo por su voz me temblaban las piernas.

Ahí estaba recostado en la cama con uno de las cintas que había en las cajoneras entre sus dedos jugando con ella.

-Hola.- Me di una palmada en la frente mentalmente. ¿Encerio de todo lo que se puede decir ante esta vista digo eso?

-Rose, nena ven aquí.- Dio dos palmadas a la cama.

Me acerqué lentamente y me senté a su lado. Me sentía en una jaula con un león.

-Te perdono por todas esas cosas que hiciste pero a mí no me gustan las chicas desobedientes.- ¿Qué?

- Creo que no estoy entendiendo del todo.

-No me agradó nada que estuvieras borracha en una fiesta y tal vez si no hubieras hecho eso Jeffrey no te hubiera llevado.

-Lo siento mucho yo no te quería atraer molestias pero tú me dejaste botada en la fiesta y Alex era...

-Tampoco me gusta las chicas que replican.

-Yo... Lo siento.

-Bien.- se levantó y comenzó a desabrochar su camisa.- Creo que necesitas una lección de modales.- desabrochó su pantalón.- Y yo te la daré.

-Harry suenas como un padre.- reí.

-Pero yo no soy tu padre.- se acercó a mi oído.- yo soy tu papi.- me dieron escalofríos al oír eso y puso la cinta que tenía sobre mis ojos.- Junta tus muñecas y pon tu manos al frente.- lo hice y sentí un lazo de cuero enrollar mis mis muñecas.

-Harry...- dije casi en un susurro

-No muñeca, ya te dije quién soy.- empezó a dejar besos sobre mi cuello.

-Pa-Papi.- esto debería de sonar raro pero de verdad era excitante.- Esto está mal.- susurré.

-Entonces nos iremos al infierno.