ROSE (Harry Styles)

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HARRY

Desde que Rosallie dijo que olvidaría todo lo de nosotros no supe cómo sentirme. Es como si tuviera una espina en medio de mi pecho. Solo Dios sabe cuánto la extraño.

- Señor Styles la reunión para el inicio de la nueva línea Styles inicio en 5 minutos ¿Desea algo antes de que inicie?

- No Mónica, solo asegúrate de que todo esté en orden.

- Si señor Styles.- se retiró.

Nunca lo he llegado a mencionar a alguien pero siempre me ha llamado la atención el arte y hoy se hará la propuesta para iniciar una marca de ropa "Styles" a pesar que lo mío es más las letras y la música pero también una de mis grandes pasiones es la moda. Mi madre y mi hermana fueron las únicas que presenciaron esa pasión por la música ya que tenía una banda cuando era joven pero el tiempo pasa y creo que vamos madurando.

- Señor Styles lo están esperando en la sala de juntas.

- Bien, ahí vamos.

***
- Es un trato Styles. No sé cómo lo haces pero tienes un gran poder de convencer.

- Gracias George. Ten por seguro que en sus manos tienen una empresa muy exitosa.

- Créame que tenemos expectativas muy altas y sabemos que usted las va a alcanzar o incluso superar.

- Tenlo por seguro. Hasta luego.- extendí mi mano para estrechar la suya y retirarme.- Nos vemos mañana Mónica.

- Descanse señor Styles.- se despidió Mónica.

Estaba en la entrada del estacionamiento y me detuve a sacar las llaves de mi auto de mi bolsillo trasero pero una voz femenina me hizo girar mi cabeza.

- Tienes un poder de convencer eh?

- ¿Qué haces aquí Larissa?

- Vaya modito de saludar.

Larissa, fue novia o algo de uno de mis amigos, Leo, la verdad no recuerdo si lo "nuestro" inicio antes o después de que ella terminará con el pero fuimos amigos con derechos. Llevó demasiado tiempo sin verla y no terminamos nada bien ya que ella no se tomó a bien el que quisiera terminar la "relación" que teníamos para irme a París.

- La última vez que nos vimos me lanzaste un florero.- le dije serio.

- Deberías comprender que no recibí la mejor noticia.- empezó a caminar hasta quedar enfrente de mi.

- Solo éramos amigos con derechos que tú lo confundieras no es mi culpa.

- Dejemos eso en el pasado.- tomo mi corbata y la acomodo.- no quiero pelear contigo.

- ¿Podrías llegar al grano de tu repentina aparición?.- aparte sus manos de mi.

- No te preocupes no vengo a recuperar algo muerto. Trabajo en una empresa y es ese tipo de empresa que te gustaba cuando eras soltero.

- ¿Eres prostituta?

- No estúpido. Yo solo ayudo a encontrar clientes y contar el dinero.-hizo una mímica con sus manos para representar el dinero.