Nuestras Noches (Jimin & tú ) [t/n___]

Capítulo 5

Me abrió la puerta del asiento de copiloto de su coche y entré con una sonrisa de oreja a oreja, no creía nada de esto, en un momento él entró y ya estaba conduciendo, también sonreía y me miraba de reojo cada vez que podía. Empezamos una conversación en la que hablábamos de diversos temas pero sobretodo reíamos sin parar.

Casi sin darme cuenta habíamos llegado a la fiesta. Seulgi estaba en la puerta con Yeri, era extraño no verla con Jimin sobretodo, era extraño que no lo tuviese encerrado en alguna habitación para hacerle a saber qué.

Todos se sorprendieron cuando me vieron, y más aún cuando me vieron acompañada de Jungkook, quien me cogió la mano en cuanto salí de su lujoso coche.

Una vez dentro de la casa, lo cual me costó llegar a hacer, esquivando cuerpos borrachos que ya había en el jardín. La música estaba lo suficientemente alta como para tener que gritar para hablar.

Jungkook me sirvió un cubata, vodka rojo con naranja, un alcohol suave así que se lo agradecí. Iba saludando a gente que no sabía ni que conocían mi nombre, como cambia todo al ir de la mano de uno de los populares.

Jungkook me llevó a una parte de la casa que era lo más parecido a una pista de baile que podía encontrar allí.

Había estado varias veces en casa de Jimin pero hacía mucho tiempo de eso y a penas la recordaba.

Empecé a bailar con Jungkook, bebí algún cubata más de lo mismo que antes pero no estaba acostumbrada así que me subió un poco más rápido de lo que pensaba.

-Estas preciosa- me susurró al oído, estabamos con los cuerpos totalmente pegados. Le sonreí.

Me estaba agarrando de la cintura y yo a él del cuello. Empecé a notar su respiración cerca de mi cuello, volví a sonreír sin motivo alguno. Vi que él sonrió de lado, me encantaba que hiciese eso.

Empezó a darme besos largos en el cuello, me sonrojé sólo de pensar en la gente que nos estaría mirando.

-¿Te apetece descansar?- me preguntó alzando una ceja. De nuevo sólo supe asentir.

Me cogió de la mano y subimos juntos las escaleras, esta parte de la casa estaba más vacía, sólo veía puertas cerradas y alguna persona que subía o bajaba, pero nada que ver con lo que había abajo.

Nos metimos en una habitación, él fue directo a esa como si supiese que no habría nadie.

-t/n____ me gustas mucho- me quedé de piedra- estás impresionte de verdad- me sonrojé y sonreí- me encanta que te sonrojes por lo que digo...

Me tocó una mejilla con una de sus manos mientras la otra se posicionó en mi cadera. Me acarició la cara y cerré los ojos un segundo.

Cuando los abrí me estaba besando. Enseguida los cerré como un acto reflejo. Apoyé una mano en su pecho y la otra en su hombro mientras él bajaba la que tenía sobre mi mejilla hasta la cintura.

Comenzó siendo un beso suave y dulce, pero conforme su mano bajó el beso se hizo más apasionado. Me separé para coger aire, se lamió los labios, sonrió y siguió besándome.

En algún momento que no recuerdo sus manos bajaron hasta tocarme el culo y apretarme contra él.

Consiguió que poco a poco llegasemos a lo que parecía la cama de la habitación.

ESPERA. ¿QUÉ? ¿UNA CAMA? Yo claro que había besado antes a algún chico pero nunca pasaron de ser simples besos, no creo que estuviese preparada para tener que usar la cama.
De todas formas, no podía pararlo, no me lo autopermití, había soñado esto años y aunque mañana puede que no me acordase de como llegué a acostarme con él, en el momento no se me hizo tan mala idea.

-t/n____ me pones muchísimo- hablaba en susurros con la respiración agitada.

Aprovechó y bajó a mi cuello, esta vez no solo me lo besaba, también lo chupó una y otra vez, me lo mordió.

Yo respondía con gemidos que salían de mi garganta.

Sus manos estaban colocadas una en mi cintura y la otra al lado de mi cara, era su único apoyo para no aplastarme en esa cama.

-Si no me pides que pare no lo haré t/n___- su voz sonó ronca, estaba borracha y muy excitada.

-Sigue Jungkook- susurré.

-Repítelo

-Jungkook sigue por favor- le dije con voz entrecortada.

Sonrió victorioso.
Me indicó que me quitase la camiseta y eso hice, se detuvo unos segundos a mirarme. O mejor dicho, a mirar mis pechos aún cubiertos por el sujetador.

-Estás impresionante t/n___- cogió aire y siguio lamiendo, besando y mordiendo pero esta vez una de sus manos fue directa a uno de mis pechos.

Se quitó la camisa casi arrancándosela. Ahora era yo quien miraba su bien esculpido cuerpo. Hace unos años cuando ya estaba enamorada de él, estaba mucho más delgado y sin casi músculos.

-Mira lo que me haces t/n___- condujo una de mis manos a su entrepierna y la quité en cuanto noté a lo que se refería- qué inocente... me encanta que seas así, me pone más. Sonrió de lado.

-No hagas eso por Dios- le pedí.

-¿El qué?- creo que por un momento dudó de si en realidad quería.

-Sonreír así- sonrió de lado. Suspiré.

Me desabrochó el sujetador, y justo en ese momento la puerta de la habitación se abrió. En cuanto vi que alguien la había abierto y se había quedado mirando intenté abrochar el sujetador de nuevo pero se me hacía imposible. Estaba muy borracha. Al menos no se me veían los pechos, seguía colocado bien pero faltabala sujeción.

-¡FUERA DE MI PUTA CASA!

Esa era... la voz de... ¿Jimin?

Jungkook abrió los ojos como platos pero no se quedó callado.

-Jimin, déjame acabar lo que he empezado- dijo señalándome, me hizo sentir un objeto en ese momento aunque en realidad tampoco me enteraba mucho de lo que pasaba.

-¿Qué parte de fuera de mi casa no entiendes?

Aunque no llevaba el sujetador abrochado me levanté sujetándolo con mis manos en busca de mi camiseta para irme.

- Tú no t/n____- Jimin me dirigió la mirada, cambió mucho su forma de hablar en un segundo, sonó dulce o más bien compasivo.

Jungkook me dio un beso y me dejé. No entendía nada.

-Ya acabaremos cariño- me susurró antes de cruzar la puerta donde estaba Jimin apoyado.