No me provoques (Camila G!p)

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Narras tú

–¿Cuál se ve mejor Sinu?– dije mirando a la madre de mi novio.

–El azul te queda mucho mejor– dijo apuntando el gorro azul –¿Sabes que es el color favorito de Luke?– asentí poniendo el gorro en mi cabeza.

–Sí, siempre viste de azul– reímos y escuché pasos en la escalera, apareció la sexy hermana de mi novio y desvíe mi vista de ella, estaba sin camisa y sus abdominales eran demasiado para mi, siempre me provocaba cuando estaba cerca de mi.

–¿Vas a quedarte?– asentí –Yo debo ir a buscar el pastel a la tienda, ¿Te quedas con Camila?– asentí mirando a la chica, quien ahora comía una banana –Nos vemos luego, pásenla bien– se despidió con un beso en la mejilla y quedamos solo nosotras.

–Luke es demasiado afortunado– rió mirando mi cuerpo y me sonrojé levemente –Si no fueras su novia, intentaría tener algo contigo– la mire algo sorprendida ya que lo decía muy naturalmente, camino hacia el sofá y se sentó en el sin dejar de mirarte –¿Piensas quedarte allí todo el día?– rió nuevamente y me acerqué a sentarme.

–¿Por cuantos años eres menor que él?– dije tratando de cambiar el tema.

–Por 3– asentí.

–Tenemos la misma edad– me sonrió y se acomodó, en su movimiento mi vista se desvió a su entrepierna abultada.

–¿Vas a mamar mi polla? ¿O solo vas a mirar?– levanté mi vista algo sonrojada y reí.

–Toda la personalidad que no tiene tu hermano la tienes tú– reí nuevamente.

–Y toda la polla también– dijo sonriéndome y traté de no hacerlo, pero su mirada pervertida era demasiado para mi.

–Y todo lo ordinario también– dije mordiendo mi labio.

–Sabes que te mata que te hablen así– se levantó –¿Alguna vez haz jugado play?– dijo tomando los mandos.

–Sí, lo hago bastante seguido– se volvió a sentar y me extendió el mando.

–Pues juguemos– miró mis labios unos segundos –¿Sabes jugar FIFA?– asentí.

–Te patearé el trasero– reí y ella giró sus ojos.

–Eso no ha pasado desde hace mucho– puso el juego –Hagamos algo interesante....Cada gol que metamos...Será un reto– levanté mi ceja –Si te meto un gol, debes hacer un reto que yo diga y viceversa– asentí.

–Prepárate para correr desnuda por la calle– reí.

–Amarías verme desnuda hermosa– mordí mi labio y miré la pantalla –Escoge tu equipo– así lo hice y comenzamos a jugar, no quise mirarla más ya que en la posición que se encontraba el bulto en su pantalón era demasiado notorio.

Luego de unos 3 minutos jugando metí un gol y lo celebré riéndome de ella, quien hizo un tierno puchero.

–Yo quiero que...– una idea loca vino a mi cabeza pero enseguida la etiqueté como algo prohibido –Ammm– ella seguía mirándome –Mezcla 5 cosas de la nevera y bébelo– se levantó.

–Pensé que dirías que te mostrará mi gran polla, pero me conformo con eso– camino hacia la cocina y fui tras ella.

Ya se me hacía bastante difícil el concentrarme en que ella es la hermana de mi novio, era demasiado provocativa y sexy como para ignorarla.

–Vas a vomitar con eso– dije al ver que sacó una cerveza, jugó de naranja, leche de banana, agua y soda.

–Tu vas a vomitar cuando mi polla esté bajando por tu garganta– me sonrió y yo suspiré –No hagas eso...Te deseo demasiado y lo sabes– sacó un vaso y me miró –¿Quieres mezclarlo tú?– asentí y me acerqué a ella para abrir los envases y en el vaso mezclar un poco de cada uno.

One Shots - Camila Cabello y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora