Narras tú.
–Todos se burlan de tu torpeza en internet– reí –¿Cómo hiciste eso?– volví a reír.
–Es que tenía las manos sudadas, por eso se calló y cuando tuve que ir a recoger el micrófono me caí yo también– reímos –Nunca más vuelvo a intentar tomar agua mientras bailo– le sonreí y ella dejó de reír –Te extraño...– mordió su labio triste.
–También te extraño Camz– me acomodé dejando la laptop sobre mis piernas.
–No sabes cuanto extraño dormir abrazada a ti...Me hace mucha falta tu presencia _____– vi que sus ojos estaban levemente cristalizados.
–Yo extraño que me cantes al oído cuando tengo pesadillas– suspiré cruzando mis piernas.
–Yo extraño tus labios...Demasiado...Deberías mostrármelos– solté una carcajada, amo que Camila siempre sepa como hacerme reír.
–¡Camila!– ella rió.
–No es mi culpa, tú me tienes mal acostumbrada– escuché un ruido de una puerta abrirse y Camila dejó de sonreír enseguida –Debo irme Amor...Hablamos luego– asentí.
–Ten un buen día Camz, Te amo– me sonrió ampliamente.
–Dame un besito– acercó sus labios a la cámara e hice lo mismo –Te amo, prometo que nos veremos muy pronto– me lanzó un beso y cerró la laptop.
Esa pantalla negra...Había llegado a odiarla este último tiempo, se significaba que debería esperar muchas horas para volver a hablar con mi novia, la cual está a muchos kilómetros de distancia presentando su primer tour.
No estaba en contra de que lo hiciera, ella ama la música. La música es su vida, y no puedo poner mis intereses sobre los de ella. Amo verla tan feliz cada vez que se presenta, me hace seguir adelante con nuestra relación.
Hace 3 meses que solo nos vemos unas horas o minutos al día a través de una pantalla, siempre busca sus ratos libres para charlar conmigo, sobre todo cuando mis celos me atacan.
Ella está rodeada de personas tan a su nivel, sus bailarinas son realmente bellas, y yo...bueno, yo soy yo.
Dejé la laptop a un lado de la cama y luego de unos 10 minutos mirando el techo decidí levantarme para ir a la universidad. Me di una corta ducha de agua fría para despertar y luego me vestí con un jean negro, una camiseta blanca y mis zapatillas favoritas, que me regaló Camila. Tomé mi bolso y salí de mi departamento camino a mi auto, conduje hacia mi universidad y me preparé para un día demasiado agotador.
Luego de todas mis clases volví a sentarme en mi auto, enseguida mi móvil comenzó a sonar y olvidé todos mis problemas al leer aquel hermoso nombre en mi pantalla.
–¡Bebé! ¡No sabes lo que acaba de pasar!– dijo emocionada y no pude evitar reír –¡Tengo toda la tarde libre! El show será más tarde, así que podremos conversar unas largas horas– mordí mi labio.
–No sabes cuanto deseo hablar contigo Camz...Pero Amor, mira tus ojeras, debes dormir– ella negó.
–Eres mucho mejor que dormir _____– sonreí sonrojada.
–Necesitas dormir...Estas todo el día haciendo cosas Amor...Ahora yo debo terminar algunos proyectos, duerme unas cuantas horas y hablaremos luego de tu show si quieres, pero necesitas dormir si quieres dar todo de ti– hizo un puchero.
–Pero te extraño demasiado– dijo con un tono tierno.
–Pues intenta soñar conmigo...Y con mis labios– rió levemente y asintió.
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One Shots - Camila Cabello y tú
RandomEste es el primer libro que escribo, espero que les guste Se que sí, porque son unas PECADORAS! Al igual que yo jajajaj