Hola, se que no actualizo muy seguido, pero la verdad es que no acostumbro a escribir tan rápido y soy algo quisquillosa.
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Lía:
No quiero levantarme, mis ojos me duelen por la resequedad, todo me duele y no sé si mi cansancio mental sea peor que el físico, siento que algo aprieta mi cintura, me quiero mover pero algo mantiene presas mis piernas. Después de pensarlo nueve veces decido abrir mis ojos y veo a Thomas, se ve cansado, no se porque optó por consolarme ayer, no lo voy a despertar, me remuevo un poco y logró salir de su agarre, me pongo la bata de seda y voy al armario, tomo algo de ropa y me dirijo al baño, cierrob la puerta me desvisto y sin más me introduzco en la lluvia artificial que moja todo mi cuerpo, siento un punzante dolor se instala en mi pecho y siento un nudo en mi estómago, siento que mis ojos se humedecen nuevamente y ya no se si lo que chorrea por mis mejillas son lágrimas o las pequeñas gotas de agua provenientes la lluvia artificial. Después de más de 20 minutos en la ducha, decido salír, seco mi cuerpo y me pongo un pantalón negro, una blusa blanca y mis converse blancos. Salí del baño y ví que Thomas seguía dormido, está haciendo frío y está muy desabrigado, no había notado que duerme sin camisa, me hacerco a la cama y no puedo evitar ver su rostro, se ve tranquilo y su respiración es lenta, deposito un suave beso en su mejilla y lo cubro con la sábana. Rápidamente salgo de la habitación, ¿Qué demonios sucede conmigo?, yo no soy así, creo que estoy enloqueciendo.
Bajo a la primera planta y comienzo a explorar todo, a decir verdad la casa es bastante grande, después de caminar entre varios corredores, termino denuevo en mi punto de partida, voy a lo que aparentemente es la cocina, y no me equivoco. Frente a mi se encuentra una grande y preciosa cocina con encimeras negras y electrodomésticos de acero inoxidable. Voy hacia el refrigerador y lo abro para saber que hay en el, veo de todo, miro en las alacenas y me topo con masa panqueques, odio está masa, la voy a hacer de cero, saco todo lo que necesito y veo un frutero con manzanas y otras frutas, busco un bowl y comienzo a hacer la masa, una vez termino la masa, tomo una sartén y los pongo a cocinar, mientras tanto preparo jugo de naranja y corto unas manzanas. Cuando terminé de preparar todo comencé a emplatar y decorar todo, me doy vuelta y comienzo a lavar la vajilla, siento que alguien me observa, creo que ya me volvi paranoica.
Recuerdo cuando mi padre, mis hermanos y yo despertavamos temprano y hacíamos el desayuno para mamá. Repentinamente siento que unos fuertes brazos se posan en mi cintura, siento un nudo en mi estómago y justamente cuando iba a soltar un codazo, me giran y chocó con el fuerte y cálido pecho de... Thomas.
-Buenos días- dice esbozando una sonrisa.
-Casi me matas de un susto- digo dándole un golpe hombro.
-Auch, en mis tiempos se decía buenos días y se golpeaba a la gente- dice con un falso tono de indignación.
-Pues bienvenido a está época anciano- digo soltando una risita.
-¿Cómo me llamaste?- dijo arrinconando me contra la pared.
-¿Qué no me escuchaste?, bueno, no te preocupes, lo repetiré para ti ¡¡AN-CIA-NO!!, es más...- fuí interrumpida pon unos cálidos y suaves labios que se posaron sobre los míos.
Sus manos se deslizaron por mis hombros y siguieron bajando hasta llegar a mi cintura, me apega más a su fuerte y duro pecho, enredo su cabello entre mis dedos y el pide permiso para introducir su lengua en mi boca y así lo hace, su lengua experta se enreda y batalla con la mía. En ese momento escuché que alguien abría la puerta de la cocina y rápidamente me separé de Thomas y veo a la misma mujer que estaba conmigo en la habitación de la camilla.
-¡¡DIOS MÍO SANTÍSIMO PERDÓN!!, ¡¡LAMENTO MUCHO HABER INTERRUMPIDO SEÑOR!!- dijo para luego salír corriendo de la cocina.
-¿Quién es?- pregunté yendo hacia la pequeña isla de la cocina para poner el desayuno.
-El la es Anastasia, una de las sirvientas- dice restándole importancia.
-No la llames así- dije disgustada.
-¿Cómo?- dijo con una cara de idiota confundido.
-¿Pues cómo?, sirvienta, se escucha despectivo y denigrante, al menos dile criada, suena más respetuoso- dije pasándole unos cubiertos.
-Está bien, cálmate, respira, por cierto... gracias por el desayuno- dijo para luego comenzar a comer.
El desayuno transcurrió en completo silencio, yo terminé primero, me levanté y lavé mi vajilla. Sin más me fuí a la habitación, tomé mi teléfono, mis audífonos y fui al antejardín que encontré en mi pequeña choco aventura por la plata baja de la casa.
Por fin puedo estár tranquila. No quiero pensar, no quiero sentir, no quiero hacer nada. Quisiera cerrar los ojos... y simplemente desaparecer.
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Bueenooo, hasta aquí el capítulo, espero halla sido de su gusto y no olviden dejar su sensual voto y comentario.
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𝕹𝖆𝖗𝖈𝖔𝖙𝖗𝖆𝖋𝖎𝖈𝖆𝖓𝖙𝖊
RomanceThomas Collins: Guapo, mujeriego, inteligente, serio, celoso, posesivo, de carácter fuerte y ... el narcotraficante más temido de todo el Reino Unido. Lia Reid: Fría, calculadora, atlética, hermosa, dulce, directa, inteligente, sádica, algo rencoros...