스물아홉

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twenty-nine; CHANGE


—¿Así que no me vas a escuchar?

Changbin negó con la cabeza. —No.

—Changbin, no lo hagas. Juro que no te va a gustar. –advirtió Felix, se acercó al pelinegro, que estaba estático en su casa.

—Felix es solo una clase de rap. Y Hyunjin no viene de todos modos. No hay nada de lo que preocuparse. –Seo estaba tratando de convencer al rubuo con calma y no comenzar una pelea.

—No se trata solo de ese tipo.

El pelinegro lo vio, vio como Felix lo miraba, su novio sospechaba de él. —No confías en mí, ¿verdad?

—No confío en nadie.

Seo rió amargamente. —No confías en mí cuando eres el que engañó antes.

—Ya pasamos eso, no lo menciones. –frunció el ceño.

—No sabes Felix. No sabes cómo pasaron mis días durante el tiempo que estuviste ausente. Estaba deprimido y herido irreparablemente y sí, todavía estoy herido. Cuatro años de relación Lee y estabas haciendo trampa por un año entero. ¿Qué tan bueno suena eso? —Changbin escupió, sus ojos brillando.

—¿Me perdonaste sin embargo? –Felix miró hacia abajo.

—Porque te amo y aunque me lastimaste, no puedo dejarte así. Esperaba que cambiases pero sigues siendo el mismo. Muy posesivo y dominante en cada jodida cosa. –El pelinegro se sentó, tenía que hacerlo, sus rodillas se estaban debilitando y sus lágrimas amenazaban con caerse.

—Yo... no sé qué decir. Sé que soy posesivo, pero eso es lo correcto. No me gusta ver a los chicos mirándote a los ojos. Y lo hacen más cuando rapeas. –Felix dijo, fijo en los ojos de Seo.

—Cambiaré mi trabajo. ¿Estarás bien entonces? –preguntó Changbin y Lee asintió.

—¿Qué tienes en mente?

—¿Barista tal vez? Me encanta hacer café o trabajaré en algún café.





"Los baristas son calientes."

toilet roll ; ChangjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora