Capítulo 33

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Por primera vez en mi vida llegaba a tiempo a algún lugar y el vuelo de Kaya se había retrasado, me senté en una de las bancas que había en el aeropuerto para esperar a mi mejor amiga una voz anuncio que el vuelo de Los Ángeles llegaría 30 minutos tarde, pensé un momento si debía irme a mi casa y volver después pero decidí esperar saque mi celular y me la pase jugando en el hasta que la misma voz de antes anuncio que el avión en el que Kaya venia había aterrizado.

Busque a Kaya en la banda transportadora del equipaje y después de dar más de tres vueltas sin poder localizarla vi que alguien me hacía señas con sus maños y camine hacia ella, me pareció ver a alguien muy parecido a Dylan saliendo por la puerta del aeropuerto incluso traía una almohada sobre su equipaje pero el sujeto desapareció en un parpadeo, sacudí la cabeza para despejarme solo estaba imaginando cosas.

- ¡Hola Tom! – Kaya me abrazo con uno de sus brazos porque con el otro llevaba su maleta y yo le devolví el abrazo – Como te extrañe.

- Y yo a ti – La solté y vi que tenía unas pequeñas lagrimas sobre sus ojos – No llores Kaya.

- Lo siento ya sabes como soy.

- Si paras de llorar te invito el almuerzo – Kaya asintió como una niña y salimos del aeropuerto intente localizar al chico de antes pero no lo encontré quería comprobar que no estaba volviéndome loco y que si había un chico idéntico a Dylan pero él no aparecía, tal vez si me estaba volviendo loco después de todo aun no había superado la ruptura con Dylan ya no lo demostraba frente a mi familia y dormía como es debido pero las pesadillas seguían atormentándome y era peor cuando tomaba las pastillas que mi doctora me receto estas solo hacían que las pesadillas fueran más largas y que yo no pudiera despertar de ellas, pero en el exterior era todo calma y serenidad mi madre no volvió a tocar el tema de Dylan desde el día del accidente y Ava solo lo mencionaba cuando me veía un poco desanimado –

- No me gustan esas ojeras que tienes – Kaya y yo nos sentamos en un restaurant que yo conocía y ella me miró fijamente - ¿Estas bien Tom?

- Si es solo que no dormí mucho anoche.

- No te creo.

- Estoy bien Kaya aún no lo supero pero estoy bien – Esa era una gran mentira aun quería que la tierra me tragara cada vez que recordaba a Dylan los moretones habían sanado pero mi corazón aun no lo hacía –

- Hablando de eso – Kaya lucia algo incomoda y no me miraba a los ojos – Estuve quedándome en la casa de Dylan todo este tiempo y...

- ¿Qué tú qué?

- Solo escúchame por favor – Yo solo asentí algo enojado no me gustaba la idea de que Dylan se haya quedado con mi mejor amiga todo este tiempo – No planeaba quedarme tanto tiempo pero él me explico todo y me quede para ayudarlo porque el pobre se veía muy mal.

- Si claro él fue quien termino conmigo porque se sentiría mal si al fin volvió con su novia.

- Él nunca quiso terminar contigo en serio Thomas me consta el solo dijo todo eso porque no tenía opción.

- No lo defiendas Kaya entiendo que te haya convencido de que él no tenía la culpa pero él fue muy cruel conmigo.

- Lo sé, el me lo conto todo pero en serio él no tenía opción – Pensé en irme de ahí en ese instante quería gritar de lo frustrado que me sentía no podía creer que mi mejor amiga estaba poniéndose del lado del sujeto que rompió mi corazón en mil pedazos – Su exnovia lo estaba chantajeando.

- No puedo creer que se haya inventado una excusa tan ridícula.

- Es verdad yo misma lo vi – Kaya revolvió en su bolso y saco su celular – Thomas soy tu mejor amiga en serio crees que te mentiría.

100 Razones para amarte (Dylmas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora