Dragon's Daughters.

Capítulo Treinta.

«Desde hace más de media hora, Derham ha sido cubierta por criaturas insectoides que caen al suelo cómo gotas de lluvia. Los reportes desde Adquistes, nuestra ciudad vecina nos advierten que las criaturas son hostiles. Las hadas de las fuerzas de defensa junto a los guerreros de Luz, están haciéndole frente a la extraña amenaza, pero al ser atacados, su número se multiplica. El epicentro del caos es la ciudad de Magix, reportes de ciudadanos avistan la lluvia aparecer primero en los alrededores de la academia para hadas Alfea.»

Diletta frunció el ceño, mientras cambiaba y cambiaba los canales que llegaban a Melodía desde Magix.

Darren, su marido, se encontraba tras ella cruzado de brazos, ya en un uniforme de los utilizados por las fuerzas armadas de Melodía.

— Son similares a lo que los viejos contaban. Aquellos que lograron regresar de Domino.

— Es el Ejército de las Tinieblas— asintió la mujer, sabía del nombre gracias a Daphne, y la historia catalogaba a esas criaturas con infamia.

— No sé si envíen a por nosotros, pero si piensas lanzarte a ese sitio, iré contigo.

— Me conoces bien— replicó la mujer, con una sonrisa extendida.

Complicidad. Quizás eso era lo que mantenía la relación viva. Se conocían bien, eran un equipo, y apoyaban las decisiones del otro.

— Suerte que estás de vacaciones — dijo Darren, frunciendo el ceño cuando su esposa pausó en un canal.

«Nuestra unidad de drones han logrado captar el momento exacto en que dos combatientes pausaron por un momento la reñida batalla. Un hada, cuya transformación no sabemos su definición ya que parece estar más allá del nivel Enchantix, y un monstruo esquelético...»

— ¡Es Daphne!

— ¿Entonces, iremos?

— Por supuesto.

La pareja salió de la casa, la mujer creando un portal, y ambos cruzaron hasta estar de frente de la academia de hadas.

*****

— Nunca he jugado un juego de estrategia a gran escala, digo, sólo con personajes de una sola especialidad.

— No importa, Tecna, tenemos confianza en ti— Dijo el hada de las mareas, y a su lado, el hada de la energía polínica asintió,

— De acuerdo.

Un mapa holográfico se extendió, el hada de cabello rosáceo entrecerraba ligeramente los ojos, luego volteaba a ver alrededor, escuchando los gritos de los combatientes, y escuchando los extraños sonidos que emitían esas cosas, y regresaba. El procedo dmse repitió varias veces.

— Ortensia, lleva a tu grupo a las torres, aprovecháremos la presencia de la barrera para destruir a las criaturas voladoras. Emma, tú y tu grupo a la otra torre, y manteneos en la cúpula, que si intentan derribarla os sera más fácil escapar por aire a estar en el peligro del encierro.

Diletta apareció, conteniendo a una criatura con una barrera de energía, y observó al grupo que seguía al hada de cabello azul oscuro y lentes, y al hada de cabello rubio fresa en coletas y pecas en el rostro, volar hacía las dos diferentes torres. En el centro un hada con cabello corto pixie y rosáceo parecía ser el cerebro tras la operación.

— Stella, necesitaremos concentrar la energía solar al máximo. ¿Quién de las hadas Enchantix posee energía tipo estelar?

Tres chicas se acercaron al hada de la tecnología, todas en su forma alada completa.