❝¡Maldición, me gustas!❞

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Supongo y ya saben de qué se va a tratar este capítulo así que pondré la típica advertencia a la cual nadie le hace caso.

Si eres menor de edad leer bajo tu responsabilidad ya que esto contiene lemon y eso habla acerca del sexo y  bla, bla, bla.

Simplemente ve a la iglesia y estudia mij@. 😇

[ j i m i n - p o v ]

Sus manos se la pasaban masajeando como loco mi trasero y no entendía el porque me gusta tanto que lo haga, me siento estremecer ante sus caricias y creo que eso le gusta.

—Jimin — Detuvo sus movimientos de la nada y debo admitir que me molestó un poco — ¿Estás seguro de esto? — Susurró contra mi oreja y yo simplemente asentí con la cabeza, temía que si abría la boca se me podría escapar otro jadeo o algo por el estilo — Dilo — Mordió levemente el lóbulo de mi oreja pero yo me negaba a abrir la boca — Quiero escucharlo de tus labios, ahora — Ahora había mordido con un poco más de fuerza lo cual me hizo soltar un jadeo e igualmente uso su voz demandante, mierda.

—E-Estoy cien porciento seguro de querer hacerlo hyung — Reprimí un gemido apretando mis labios.

—Buen chico — No me digas que tienes ese fetiche de Daddy, Oppa o cosas por el estilo porque me mato.

Estuve mucho tiempo pensando que no me di cuenta de cuando atacó mis labios con fervor, pasión y lujuria; un gemido murió en ese beso y logré sentir como sonreía irónicamente.

—Presumido — Susurré divertido.

—Siempre — Mordió mi labio jalando de este un poco robándome un gemido — Que sensible — Rió nuevamente.

Ignore su comentario y ahora fui yo quien lo besó con un toque de desesperación a lo cual el gustoso correspondió, su agarre en mis glúteos se afirmó más y yo hice lo mismo con mis piernas y fue cuando finalmente nos separamos de la pared.

No sabía si nos íbamos a caer o si llegaríamos a donde sea que me estuviera llevando pero no me importaba, lo que único que quería hacer era besarlo hasta quedarme sin aire.

Sentí como él mismo rompió el beso para abrir una puerta y luego cerrar esta con su pierna.

Me dediqué a observar lo que lograba ver y me di cuenta de que no solo íbamos a tener sexo y ya, de alguna manera el lo hizo más romántico y decoro la habitación con pétalos de rosa y las cosas más cliché del mundo pero, ¿Y qué con eso?

Sentí como me picaban un poco los ojos — Te amo — Dije enrollando mis brazos detrás de su cuello y nuevamente nos besamos.

El beso era más lento pero sin embargo no perdía el toque de pasión el cual le estábamos dando. Sentí como lentamente y con cuidado era depositado en un suave colchón y unas manos se posaron en mi cintura apretando estás un poco.

—Mghm~ — Gemí levemente y al parecer el lo vio como una oportunidad para adentrar su lengua en mi cavidad bucal.

Mis brazos exploraban su cuello y jalaba levemente las hebras de su cabello sintiendo como se restregaba un poco sobre mí haciendo mis gemidos algo incontrolables.

—Y-Yoongi~ — Gemí jalando con un poco más de fuerza las hebras de su pelo. Sus labios dejaron los míos y se dirigieron a la zona a la que más temía.

Beso desde la mandíbula hasta mi cuello dejando todo un camino de besos mientras que en mi cuello daba una que otra mordida y lamida. Se detuvo en la curvatura de mi cuello y nuevamente mordió para luego succionar esa zona, ¡Me estaba dejando una marca! Y se sentía tan bien, maldición.